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Niki y Jean: el arte como acto de rebeldía

L

uego de estar cerrado cuatro años para ser restaurado, el Grand Palais de París reabrió con un gran homenaje a la alianza amorosa y creativa de Niki de Saint Phalle (1930-2002) y Jean Tinguely (1925-1991). Ella, pintora, escultora, cineasta y pionera del arte escénico. Él, autor de esculturas realizadas a partir de desechos de la sociedad de consumo.

En varios salones del museo se exploran las creaciones visionarias de quienes tuvieron una decisiva influencia en el arte contemporáneo. Y se hace a través de esculturas, películas, cartas-dibujos sobre sus obras y proyectos, archivos e instalaciones emblemáticas. Gracias a esos materiales, el color y la máquina dialogan para convertir la intimidad en algo público, lúdico y revolucionario. Una manera de mostrar cómo la amistad y la colaboración artística inspiraron a estas figuras del nuevo realismo.

Las obras presentadas en el Grand Palais provienen especialmente de la colección del Centro Pompidou, así como de importantes préstamos de museos nacionales e internacionales. Todas ellas permiten (re)descubrir trabajos emblemáticos de ambos artistas. Además, la manera en que la voluptuosidad colorida de los de Saint Phalle se reconfigura en la presencia de lo industrial de Tinguely.

Niki y Jean formaron por décadas una pareja unida por lazos inquebrantables y una visión del arte como acto de rebeldía. La pareja fue clave en las primeras décadas del Centro Pompidou con creaciones espectaculares, entre ellas Le Crocrodrome de Zig & Puce (1977), monstruo de 30 metros de largo, animado desde la mandíbula hasta los intestinos. O la Fuente Stravinsky (1983), a un lado del museo y en la que se colocaron 10 esculturas, cinco de ellas, mecánicas, que recrean el ciclo del agua.

Como parte fundamental de la exposición, destaca la labor de Pontus Hultén (1924-2006), uno de los promotores del arte más importantes del siglo XX. Fue el primer director del Pompidou, al que consideró un lugar de vida y disfrute destinado al público. Además, defensor incondicional de ambos artistas.

Digno homenaje a tres personajes que desafiaron con éxito las normas artísticas tradicionales.