La brecha entre el deporte varonil y el femenil a nivel profesional es enorme. Tanto si hablamos de futbol como de baloncesto o beisbol, el atraso es significativo y los avances lentos.

En el caso del balompié, en México la diferencia es de más de 70 años, mientras el beisbol profesional de mujeres no existe.

En 2026, nueve peloteras mexicanas tendrán la oportunidad de darle visibilidad a su especialidad cuando se integre la Pro Baseball League (WPBL) en Estados Unidos, cuyo debut está programado para agosto.

“Me siento orgullosa de haber sido elegida para esta nueva liga y más porque hay otras mexicanas que estarán en este momento histórico. La verdad pensé que nunca llegaría a jugar en una liga profesional y estoy muy feliz de que se haya conseguido. Espero que sea el comienzo de mejores cosas para la rama femenil de nuestro deporte”, comentó la lanzadora tricolor Rosi del Castillo, una de las seleccionadas.

A la WPBL están convocadas nueve peloteras nacionales, quienes sortearon un exigente proceso de selección junto con 600 aspirantes. Tal y como sucedió con la creación de la NWSL (futbol) y la WNBA (baloncesto), la nueva liga pretende abrir un camino hacia el profesionalismo para jugadoras universitarias y amateur y será la única competencia profesional femenil de beisbol en Estados Unidos, contando inicialmente con cuatro equipos fundadores: Nueva York, Boston, Los Ángeles y San Francisco.

“Tendremos la gran oportunidad de darle mayor visibilidad a nues-tro deporte. Aunque las mujeres vamos ganando espacios cada año, todavía falta cultura sobre la asistencia a eventos que involucren equipos femeniles. Además de todo, llevaremos los colores de México a este nuevo proyecto y eso es un enorme orgullo”.

La incorporación de las peloteras a la nueva liga estadunidense llega tres meses después de que la selección femenil mexicana consiguiera su pase al Mundial 2026 tras una destacada actuación en el Panamericano de La Guaira, Venezuela.

“Ya he participado en ligas semiprofesionales y nunca pensé que iba a ser posible estar en una profesional. Eso significa que el deporte a nivel global va avanzando y ahora toca trabajar para que tenga éxito”, añadió Del Castillo, quien las últimas semanas se preparó en el Early Camp de los Diablos Rojos Femenil en la Academia de Beisbol Alfredo Harp Helú en Oaxaca.

Además de ella también fueron elegidas Rocío Barajas (pitcher), Edith de Lejía (tercera base), Diana Ibarra (tercera base), Esthela Segovia (receptora), Flor Valerio (lanzadora), Samaria Benítez (paradora en corto), Luisa Hernández (tercera base) y María José Valenzuela (segunda base).

Nueva York y San Francisco seleccionaron a tres jugadoras cada uno, Los Ángeles eligió a dos y Boston sumó a una.

Del Castillo, quien pasó por una lesión que la marginó del beisbol amateur durante la segunda mitad de 2025, ve con optimismo el futuro de su deporte, pues asegura que, desde que participó en su primer nacional en 2017, se han ganado espacios.

“El beisbol femenil ha crecido bastante, hay más torneos internacionales ahora. De 2017 a 2024 he visto un aumento en la participación de mujeres y niñas. Espera-ría que eventualmente se forme una Liga profesional femenil en México, y por supuesto que también sigan creciendo otras ligas como la del softbol.”