
Miércoles 9 de julio de 2025, p. 17
A casi dos meses de que Hacienda entregue el paquete económico 2026 al Congreso para su aprobación, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) pidió al gobierno federal aumentar de forma gradual la inversión pública en infraestructura, para que en 2030 represente 6 por ciento del producto interno bruto (PIB), pues esto impulsará a la economía mexicana.
Este incremento no sólo es deseable, sino necesario para detonar el crecimiento económico, cerrar brechas sociales y fortalecer la competitividad del país
, dijo Luis Méndez Jaled, presidente del organismo empresarial en conferencia.
El dirigente de esta industria recordó que la construcción tiene un efecto multiplicador, por lo que el incremento sostenido en la inversión en infraestructura impulsa el crecimiento económico nacional, acelera la generación de empleos indirectos, fortalece la competitividad del país, atrae inversión productiva y contribuye al incremento de ingresos tributarios.
Méndez Jaled indicó que busca plantear al gobierno federal que la inversión pública en infraestructura sea de 1.5 por ciento respecto al PIB en el Presupuesto de Egresos de 2026, para que en los siguientes años aumente hasta representar 6 por ciento en 2030.
Apuntó que con esta medida, la iniciativa privada también aumentaría su participación en el rubro de inversión en infraestructura, de tal forma que para el siguiente año la proporción respecto al PIB sería de 2.5 por ciento para llegar a 4 por ciento al finalizar el sexenio de Claudia Sheinbaum Pardo. De esta manera, la inversión en infraestructura en conjunto pasaría de 4 a 6 por ciento.
No obstante, reconoce que México se encuentra frente a desafíos como el entorno global complejo, marcado por conflictos bélicos, por cambios geopolíticos, por temas comerciales y por la aceleración del cambio climático.
Los aranceles a las importaciones de Estados Unidos representan una nueva fuente de incertidumbre que impacta en el comercio nacional e inversiones en México. Todo ello constituye un riesgo de mayor desaceleración para la economía mexicana. Desde 2021, nuestra economía crece de manera discrecional o discreta, cada vez menor, cada vez a menor ritmo
, apuntó.
En estas condiciones resulta prioritario impulsar el mercado interno como motor de crecimiento económico. La variable económica más poderosa para impulsar el mercado interno es acelerar el crecimiento del PIB y fortalecer la competitividad, es la inversión en infraestructura física y estratégica
, dijo.
Destacó que también es necesaria la coinversión pública o privada en infraestructura estratégica como en obras logísticas, de transporte, en obras hidráulicas y de movilidad, entre otras, así como la ampliación de títulos de concesión.
Alfonso Carrillo Silva, coordinador técnico de información y atención a sectores de la CMIC, resaltó que hay un cambio radical
respecto a la participación en las licitaciones, en particular las que maneja la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes.
No quiero decir que ya están fuera la Marina y el Ejército, no
, dijo antes de acotar que también los privados tienen obras.