Ante la inminente pérdida del teatro Manolo Fábregas con su consecuente impacto cultural y para evitar que en el predio, que supera los 2 mil 300 metros cuadrados de construcción, se edifiquen nuevas torres de departamentos, vecinos de la colonia San Rafael se inconformaron con la administración de Alessandra Rojo de la Vega en la alcaldía Cuauhtémoc por las inconsistencias en la publicitación de demolición.

De acuerdo con el oficio presentado en la dirección de obras y desarrollo urbano de dicha demarcación territorial, el permiso que se exhibe en el recinto, ubicado en la calle Serapio Rendón 15, tiene logotipos de la pasada administración 2021-2024.

Además, no cuenta con estudio de impacto urbano ni ambiental, tampoco dictamen de riesgo y la publicitación está dirigida a los habitantes de la colonia Roma Norte, a pesar que el inmueble está en la San Rafael.

El documento fue presentado antes del 11 de diciembre, que era el plazo que tenían los vecinos para inconformarse y detener el derrumbe del inmueble de planta baja y primer nivel a doble altura. Sin embargo, los residentes manifestaron que en el predio se han observado trabajos de demolición.

La motivación principal de la querella es el temor a que se construyan nuevos conjuntos habitacionales; por eso, también difunden un video en el que advierten que una nueva obra sería “un acto de crimen urbanístico y depredación” para la San Rafael.

Explicaron que la colonia se edificó sobre el antiguo lago, por lo cual reporta hundimientos; pese a eso, los desarrolladores siguen haciendo construcciones, pero un nuevo rascacielos afectará a toda la colonia porque sería un riesgo estructural ante la actividad sísmica.

Asimismo, indicaron que el teatro Manolo Fábregas está rodeado de casas catalogadas que, con la demolición, la vibración y el nuevo peso de una construcción será un ataque directo a este patrimonio.

Además, la falta de infraestructura en drenaje, agua potable sólo garantiza con la llegada de un desarrollo masivo se desate una crisis para las familias. “Eliminar el teatro Manolo Fábregas es entregar la San Rafael a la gentrificación”.

Luego de la inconformidad presentada por los vecinos, la alcaldía sólo se limitó a responder que realizaría la visita de verificación correspondiente para salvaguardar el cumplimiento de la normatividad.