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Nostalgia y rebeldía. 50 años del Yolocamba I Ta
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finales de julio de 1975 una manifestación pacífica por las calles de San Salvador fue brutalmente reprimida, lo que provocó que un grupo de jóvenes tomaran la Catedral, siendo el arzobispo en ese tiempo monseñor Óscar Arnulfo Romero. A partir de este hecho Franklin Quezada, Roberto Quezada, Paulino Espinoza y Manuel Gómez crearon el grupo Yolocamba I Ta, los cuales iniciaron un trabajo cultural paralelo siempre al movimiento popular de su país, hasta que a raíz del asesinato de monseñor Romero (el 24 de marzo de 1980) tres de ellos tuvieron que salir en una “gira” al exterior que duró más de 10 años; mientras, en el interior se profundizó la guerra contra el gobierno por parte de las distintas organizaciones revolucionarias que el 10 de octubre de 1980 se unificaron bajo las siglas del FMLN (Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional).

Teniendo como base la Ciudad de México, realizaron durante esos años una gran cantidad de conciertos tanto en las principales ciudades de Europa como de América, con una actividad artística por medio del canto revolucionario, para denunciar e informar sobre la situación que se vivía en su país. El mundo tenía hasta ese entonces un conocimiento de El Salvador al igual de su tamaño territorial, los medios corporativos controlando como siempre, daban las noticias como si se tratase de un pleito casero, silenciando siempre las atrocidades de los militares y su apoyo imperial. Y no sólo había que denunciar y promover la solidaridad, sino que además había que generar los recursos económicos para solventar en parte el sustento para la rebelión.

Hay tantas cosas que escribir sobre los Yolos como se les llama cariñosamente, pero queremos que sean ellos mismos los que escriban sus memorias artísticas, rompiendo el silencio, evitando el olvido y el desprecio como se les tiene en buena medida en su misma tierra, como “casualmente” sucedió años atrás al ignorarlos y hacerlos a un lado junto a la Banda Tepeuani y el Cutumay Camones de la grabación “oficial” del disco conmemorativo del 30 aniversario del asesinato de monseñor Romero de parte del gobierno del FMLN (que ganó la elección presidencial el 15 de marzo de 2009), a pesar de que ellos han sido los que más le han cantado al Profeta, desde la Misa Popular Salvadoreña (grabada en 1980) hasta el disco Romero (grabado en 2000). En 2016 sólo los cuatro miembros fundadores recibieron en El Salvador el Premio Nacional de Cultura.

Compañeros del Yolocamba I Ta, desde aquel día en que llegaron a México como desde antes ya habían llegado compañeros de otros lugares con diferentes motivos que se resumen con la palabra guerra. Donde conocieron nuevas calles y plazas y también observaron cómo en las avenidas había muy a menudo grandes manifestaciones populares exigiendo los mismos derechos que en su tierra y que se resumen con la palabra justicia. Transitaron gran parte del territorio mexicano contemplando campos y ciudades con diferentes fachadas que se resumen con la palabra olvido. Compartieron el pan y las tortillas y a la vez comprobaron miles de veces lo mismo que sucede en millones de partes y que se resumen con la palabra hambre. Escucharon otras lenguas tan distintas y tan iguales a las de su tierra, murmullos convertidos en gritos que dejaban de tener eco, silenciados con las únicas respuestas que se resumen con la palabra represión. Pero a la vez también se encontraron con manos trabajadoras tristes, cansadas y que a pesar de ser explotadas y coartadas en sus derechos acudían alegres y con ánimo a sus conciertos para escuchar su música, llena de esperanza para la nueva vida, sus canciones rebeldes denunciando las atrocidades contra muchos de parte de unos cuantos y como reconocimiento a su labor de verdaderos artistas populares recibiendo aplausos y aclamaciones que se transformaron en consignas y apoyos que se resumen con la palabra solidaridad.

Otro día nos llegaron noticias de que se firmaron los acuerdos y dizque ya todo estaba arreglado, y después de una década retornaron a El Salvador, el mundo entero poco a poco se fue olvidando de lo que pasó y de lo que sigue ocurriendo en su país, pero ustedes continuaron con su trabajo como también aún continúan en muchas partes la guerra, la injusticia, el olvido, el hambre y la represión. Hoy ustedes están cumpliendo 50 años que nosotros celebramos calurosamente con gran entusiasmo y solidaridad en ésta que también es su casa, donde además con gentes de todos los lugares, en calles y plazas, en campos y ciudades se escuchan cada vez más voces y cantos que se resumen con la palabras alto a la guerra, queremos la paz, que viva la libertad.

Muchas felicidades hermanos del Yolocamba I Ta por habernos legado sus cantos, que son un valioso testimonio y a la vez forman parte de una memoria histórica. Reciban del pueblo mexicano un agradecimiento con sabor a nostalgia y rebeldía.

*Cronista e historiador musical