Atiende hasta 15 mil personas diarias
Surgió en los años 70 con comerciantes que invadieron e instalaron los primeros negocios, hoy abarca unas 20 calles con cerca de 2 mil locales
Domingo 3 de agosto de 2025, p. 8
El mercado de carnes San Juan Pantitlán enfrenta problemas de insalubridad, inseguridad, delincuencia y extorsiones. Este microcosmos, que atiende en promedio hasta 15 mil personas al día, es uno de los más grandes de América Latina, conocido por ofrecer una amplia variedad y calidad de carnes, así como productos y herramientas para taquerías y carnicerías. Se encuentra en el límite entre las alcaldías Iztacalco e Iztapalapa y el municipio de Nezahualcóyotl, estado de México; los dos últimos, los más poblados de la metrópoli.
Según locatarios, el mercado abarca alrededor de 20 calles y cuenta con unos 2 mil locales: grandes accesorias que distribuyen carne y los puestos informales instalados sobre el camellón de Periférico. Ocupan uno de los carriles del arroyo vehicular y acumulan diariamente toneladas de basura.
Eso genera un intenso atasco de carros por la gran concentración de personas y automotores que acuden a comprar, así como distribuidores que se estacionan en un carril de Periférico y el puente que atraviesa la calzada Ignacio Zaragoza, en ambos sentidos, para carga y descarga de su mercancía.
La congestión se extiende a las calles circundantes, con lo que se afecta a miles de conductores y peatones que transitan por ese punto. Periférico es la vía principal que desahoga esta zona hacia Ecatepec-Texcoco y al sur rumbo a Xochimilco y la caseta México-Cuernavaca.
A todos los comerciantes que vendemos dentro del mercado nos han dado en la torre los puestos del camellón de la Calle 7. Si antes éramos 100 carnicerías, ahora somos más de mil. Muchos predios alrededor eran casas, ahora son bodegas o accesorias que distribuyen, procesan y venden carne; de igual modo, hay muchos negocios improvisados en patios de casas
, comentó Gabriel, vendedor de carne de puerco.
Invaden banquetas y la arteria impidiendo que la gente camine por la acera, porque colocan enormes mesas y soportes metálicos sobre el espacio público para colgar y despedazar las toneladas de canaletas de reses y cerdos; también reducen la visibilidad y accesibilidad de los negocios formales
, añadió.
Cada quien cuida su negocio
Además, en el mejor conocido como Mercado de San Juan hay frecuentes asaltos, robo de autopartes. Los mañosos aprovechan el tráfico para atracar camiones con mercancía. ¿Seguridad? En el mercado no existe. Cada quien cuida su negocio
, dice Carlos, vendedor de carne de res.
De acuerdo con relatos de locatarios y compradores, en junio de 2023 un hombre fue asesinado a tiros ahí; el año pasado a un niño lo atropellaron y al mismo tiempo era apuñalado un hombre que asaltaron. Meses después, en octubre, se registró una balacera en uno de los establecimientos. Una persona murió y dos fueron heridos. En marzo pasado, mataron a un comerciante y hace dos semanas un motociclista apedreó un automóvil porque le bloqueó la circulación.
La mayoría de las carnicerías operan de manera insalubre y en completo desorden. Al recorrer los largos y angostos pasillos lodosos y poco iluminados del mercado se impone un olor fétido por los desechos y vísceras de las reses recién cortadas que cuelgan en los puestos a la vista de los clientes. El hedor a sangre seca se combina con el líquido sanguinolento que escurre en el suelo mezclado con la basura.
Los vecinos se quejan por los pisos lodosos, la acumulación de desechos en callejones, del pavimento resbaloso por la verdura, pellejos y grasa animal que dificulta caminar y los exponen a accidentes o caídas.
En el mejor de los casos, los vendedores depositan los desechos de carne en botes de plástico para su posterior gestión, pero otros simplemente los tiran al piso. Miles de moscas son atraídas por ese sumidero de descomposición y basura.

Jorge Giovanni, quien vende frutas y verduras, defiende al mercado. Asegura que en ocasiones
realizan jornadas de limpieza. En Semana Santa lavamos calles, raspamos grasa, destapamos drenajes. San Juan es muy discriminado por la basura, pero se acumula durante la actividad, que es de las 3 de la mañana a las 6 de la tarde. Yo tengo limpio, barrido, mi basura aparte. Eso sí, en temporada de lluvias las coladeras se tapan con la basura, por eso mucha gente tiene la idea de que el mercado es muy sucio, pero no. Hay rumores de que quieren quitar el mercado, pero es fuente económica de generaciones de familias
.
Rechazan reubicación: sería empezar de cero
Para los locatarios, el reordenamiento del mercado de carnes San Juan Pantitlán es imposible, al menos en el corto plazo. Además, se oponen a una posible reubicación, porque sería empezar de cero, perderían a sus clientes que llegan de varias entidades del país.
No sería lo mismo; es más, a lo mejor ni venderíamos. En 1986, cuando se inició la construcción de la línea A del Metro, reubicaron a 200 locatarios a unas cuantas calles de aquí, pero quebraron
, recordó Omar, otro carnicero.
Mario Cuéllar, investigador egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), señala que en los años 70 los comerciantes invadieron e instalaron los primeros negocios permanentes, que a la fecha parecen estar en obra negra.
Conforme pasaron los años se extendieron sobre las colonias aledañas, al grado de que hasta sucursales de algunas empresas de carne reconocidas han desplazado a los pequeños comercios.
A la expansión de las bodegas de venta de cárnicos, se sumaron bodegas chinas, un hospital privado a un costado de las carnicerías y metros adelante una clínica del IMSS.
Aquí no se duerme. Desde las 2 de la mañana la gente ya está trabajando. A esa hora llegan las reses y cerdos de diferentes rastros del país. Enseguida se destazan y al final a recoger y limpiar. Por la tarde-noche se recibe la carne del día siguiente
, señala Rogelio, quien lleva más de 30 años trabajando ahí.
Gabriel pertenece a la tercera generación en su familia que se dedica a vender carne de puerco aquí, pero lamenta el incremento de la extorsión y delincuencia que los llevó a instalar sistemas de alarma y lonas con avisos donde advierten que vecinos y locatarios están unidos contra la delincuencia y la inseguridad.
Pepe Toño tiene 60 años, 45 de ellos trabajando en el mercado de San Juan Pantitlán. Muchos comercios no cierran. La administración se divide porque el mercado se encuentra en medio de la avenida Texcoco entre la Ciudad de México y el estado de México. Tendrían que ponerse de acuerdo las dos alcaldías con el municipio para un verdadero reordenamiento, pero lo veo difícil
.
En 2019, la Comisión Metropolitana de la Ciudad de México quiso platicar con los comerciantes para reubicarlos, pero no se logró. En ese entonces, las autoridades capitalinas afirmaron que el inmueble era el causante de la anarquía que durante años ha prevalecido en la zona y plantearon la necesidad de reordenar el comercio establecido.
En octubre de 2024, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, se reunió con habitantes de la colonia Pantitlán, alcaldía Iztacalco, donde reconoció que el de San Juan es un problema metropolitano histórico que se puede resolver. Incluso instruyó a su equipo para que ese día recorrieran el mercado, pero los carniceros entrevistados afirmaron que a la fecha no han sido notificados sobre un posible reordenamiento.