La dispersión salarial, como se le conoce a las diferencias entre lo que ganan los trabajadores en distintas regiones del país, ha disminuido por el aumento de las remuneraciones en los últimos nueve años, pero sigue siendo dispar entre las cuatro zonas en las que se divide la nación, de acuerdo con datos del Banco de México (BdeM).

El Reporte de las economías regionales del tercer trimestre de 2024, indica que en todo el territorio mexicano existen variaciones de los sueldos de quienes laboran en la formalidad, lo cual se atribuye a tres factores principalmente.

Las características de las personas, en este caso la educación o habilidades; las características de las empresas, que incluye la productividad; y el proceso de selección en el mercado laboral.

De acuerdo con el análisis del banco central, se encontró que en todas las regiones los tres componentes contribuyen de manera sustancial a la variación de los salarios, aunque el componente de diferencias entre personas es el más relevante, seguido por el de las empresas.

El BdeM identificó que entre 2014 y 2024 se ha observado una reducción en la dispersión salarial en todas las regiones, acompañada de una menor relevancia de las diferencias salariales entre empresas.

Este comportamiento se explica por un aumento en los salarios más bajos de la distribución, y no por una disminución en los salarios más altos, señala el estudio.

Sobre esta evolución, explicó que en 2014 la región centro tenía la dispersión salarial más alta, seguida del sur, el centro norte y el norte, que mostraban un nivel de dispersión salarial similar entre sí.

Apuntó que en todas las zonas, la varianza salarial disminuyó entre 2014 y 2023, comenzando en el sur desde 2015, en el centro en 2016, justo cuando comenzaron a mejorar los incrementos del salario mínimo general.

No obstante, en todas las regiones mejoró a partir de 2018, lo cual coincide con el mismo factor. Los incrementos al salario mínimo a partir de 2018 pueden haber contribuido a disminuir las diferencias salariales entre empresas, señaló.

Pese a ello, el estudio muestra que para 2023, la zona centro aún presentaba una varianza salarial más alta, mientras las demás mostraban niveles similares de dispersión entre ellas.

El Banco de México indicó que si bien en el tiempo las diferencias salariales han disminuido, entre regiones se mantienen brechas, pues mientras en el norte y el centro el componente de empresas es menor por una posible mayor productividad, en el sur ocurre lo contrario, es decir, pesa más este factor.

Las políticas públicas que estén orientadas a mejorar las habilidades de los trabajadores de bajos salarios y el desempeño de las empresas menos productivas podrían contribuir a la reducción de la dispersión salarial a nivel nacional y regional, concluye el estudio.