Miércoles 3 de abril de 2024, p. 21
El rescate bancario de la década de los 90 figura como uno de los principales pasivos que arrastran las finanzas públicas al inicio de 2024, último año de esta administración. Hasta febrero, el costo financiero de la deuda pública se redujo en general 7.1 por ciento.
A contracorriente, el de esas obligaciones que van por su tercer década aumentaron 10.1 por ciento, para un total de 31 mil 244.7 millones de pesos reveló la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
No sólo los pasivos IPAB reflejaron un aumento en su costo para las finanzas públicas respecto a lo registrado en el periodo comparable de 2023. Uno de cada cinco pesos de los 145 mil 851.7 millones de pesos que se gastaron en el pago de deuda pública durante el primer bimestre de 2024 fueron para cubrir pasivos del rescate bancario.
Si bien se redujo en 7.1 por ciento el costo financiero de la deuda, al interior de esta se observa que la baja se dio por una reducción en los pagos por los pasivos de las empresas productivas del estado, sobre todo Petróleos Mexicanos (Pemex), pero los del gobierno federal repuntaron.
El pago por el endeudamiento del gobierno central se disparó 21.3 por ciento en el primer bimestre del año. Se explica en parte por el repunte de 10.1 por ciento en los pagos por el pasivo bancario, pero sobre todo por el incremento de 26 por ciento en el pago de intereses por las obligaciones del gobierno federal.
Los pagos por las obligaciones de los organismos empresas productivas del estado se redujeron 53.5 por ciento, las de Pemex lo hicieron 55.3 por ciento y las de la Comisión Federal de Electricidad 48.9 por ciento.
Sumado a una tasa de interés que hasta febrero se encontraban en su mayor nivel desde que hay registro, 11.25 por ciento, y encarece el costo de la deuda que se arrastraba, este año Hacienda proyectó la contratación de 1.9 billones de pesos en deuda para apoyar el flujo de gasto público en este último año de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.