Jueves 14 de julio de 2011, p. 2
La indometacina, antinflamatorio utilizado para evitar el aborto espontáneo y para ayudar a cerrar el ducto arterioso de bebés prematuros (que en la etapa neonatal comunica las arterias aorta y pulmonar, pero una vez que nacen se cierra) podría generar esquizofrenia, de acuerdo con una investigación de científicos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
La esquizofrenia es un trastorno de la personalidad y una distorsión del pensamiento, caracterizado por ideas delirantes que pueden ser extravagantes, alteraciones de la percepción, estrés, ansiedad y cuadros depresivos. Hasta la fecha se desconoce su origen.
A partir de estudios con ratas recién nacidas los investigadores encontraron que esa sustancia eleva los niveles de ácido kinurénico, lo cual altera los niveles del glutamato, neurotransmisor que interviene prácticamente en todos los circuitos del sistema nervioso central, explicó Rocío Ortiz Butrón, líder del equipo.
Hiperfuncionalidad
La investigadora refirió que dicha alteración produce hiperfuncionalidad del sistema dopaminérgico –el cual regula ciertos tipos de comportamiento y establece la producción de dopamina que se encarga de mantener los pensamientos y percepciones acordes con la realidad–, además de trastornos en el sistema serotoninérgico (relacionado con la regulación del estado anímico, tono vital, adaptabilidad y patrón de socialización).
Como parte del estudio se han evaluado tres antinflamatorios no esteroidales: ketorolaco, diclofenaco e indometacina.
Los científicos llamaron a la poblacion en general para evitar la automedicación, pues es común el uso de antinflamatorios no esteroidales sin prescripción médica, pero sobre todo a las mujeres embarazadas, especialmente con la indometacina.