En México se prevé una reducción de 5 por ciento en la producción de maíz y de 9 por ciento para la de sorgo en 2011, por lo que se podría observar en el mercado interno cierta presión en sus precios, según anticipan cifras preliminares de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

A nivel global las perspectivas sobre los precios de los alimentos apuntan a mantenerse en niveles elevados durante el mediano plazo.

Según las últimas estimaciones de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) se esperaba que durante 2011 la producción de maíz alcanzará los 20 millones de toneladas y la producción de sorgo totalizará 7.4 millones de toneladas; sin embargo, con las nuevas previsiones de la FAO la producción de maíz caerá en mil toneladas y la de sorgo en 666 mil toneladas en este año.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) precisó que la producción agropecuaria en abril de este año fue 2.04 por ciento abajo de la obtenida en el mismo mes del año anterior.

Informes del Banco de México detallan que en el periodo enero- abril de 2011, la importación de maíz sumó un monto de 809.5 millones de dólares, 30 por ciento superior al valor de las importaciones del grano de 620 millones de dólares en el mismo lapso de 2010.

En el caso del sorgo las importaciones crecieron 6.5 por ciento al pasar de 175.4 millones de dólares en enero-abril de 2010 a 186.8 millones en el mismo periodo de 2011.

Continuará volatilidad

Con este escenario se prevé que México tendrá que importar un millón de toneladas más de maíz por un monto de 500 millones de dólares, que equivale a dos meses de importaciones de este cereal.

Al cierre de la segunda semana de junio el precio promedio del maíz blanco (materia prima para la elaboración de las tortillas) fue de aproximadamente 5 mil 500 pesos la tonelada, es decir, más de mil 500 pesos por arriba del precio registrado hasta la última semana de enero de 2011, cuando se cotizaba en 3 mil 900 pesos la tonelada.

Aunque se esperaba un incremento en la producción mundial de cereales para el próximo ciclo agrícola 2011-2012, las cifras preliminares de la FAO indican que no será suficiente para la completa reposición de las reservas que se perdieron en 2010, por lo que seguirá prevaleciendo un desequilibrio entre la oferta y la demanda.

Los índices de precios de los alimentos y de los cereales que elabora la FAO, señalan que aún se encuentran 68.8 por ciento por arriba de lo observado en mayo de 2010.

Se prevé que continúe la volatilidad en el corto plazo debido a la incertidumbre que causa la escasez de lluvias o en algunos casos demasiado abundantes, lo que podría afectar las cosechas de maíz y trigo, en Europa como en Estados Unidos.

Adicionalmente, se espera que continúen al alza los precios de los energéticos, materias primas, metales, minerales y fertilizantes durante lo que resta de este año. Es importante destacar que la evolución de los precios de éstos depende en gran medida del comportamiento de los precios del petróleo y el fortalecimiento del dólar, ya que contribuyen a una mayor demanda de los contratos de futuros de las materias primas, elevando sus precios.

Durante mayo, el precio internacional del trigo mantuvo un comportamiento volátil para promediar 361.75 dólares por tonelada, este precio es 84.8 por ciento mayor que el reportado en el mismo mes de 2010. Respecto del precio del sorgo, cuyo comportamiento va en línea con el que muestra el maíz amarillo, se ubicó en 273.39 dólares por tonelada, cifra 69.5 por ciento por arriba de la de mayo de 2010.

En el ámbito nacional, los precios de algunos productos de consumo básico retomaron su tendencia alcista y podrían mantenerse en esos niveles si continúa la incertidumbre de abasto ante la posibilidad de una reducida oferta por la menor superficie de siembra y las mayores mermas en cosechas, luego de las situaciones extremas de clima (heladas, sequías y lluvias) ocasionadas por la inestabilidad de los cambios climatológicos. Con ello, el abasto de productos básicos en el mercado nacional es incierto, lo que explica el aumento de los precios al mayoreo de algunos alimentos, granos y oleaginosas, consideró el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP).

De acuerdo con la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productos del Campo (ANEC), cerca de 8 millones de hectáreas de maíz, frijol, arroz y sorgo, principalmente, de las regiones del Bajío, Occidente, Nayarit, Michoacán, Sinaloa y el sur y sureste del país estarían en riesgo por el retraso de lluvias.

Asimismo, la Federación Mexicana de Productores de Arroz reportaron que alrededor de 10 por ciento de la producción de otoño-invierno se verá afectada por la falta de lluvias y el intenso calor; así también, productores de Tamaulipas confirmaron que aproximadamente 500 mil hectáreas han sido afectadas por falta de agua, donde se ha perdido más de 30 por ciento de la cosecha habitual.

Por otra parte, los elevados precios del maíz blanco continúan presionando al alza el precio de la tortilla de maíz, producto de consumo básico de los mexicanos. Al 13 de junio de 2011, el precio promedio nacional del kilogramo de tortilla se ubicó en 10.96 pesos, es decir, 1.12 pesos por arriba del observado hasta el 14 de junio de 2010 (9.84 pesos por kilo).

Hasta el 13 de junio de 2011, el mayor precio en tortillerías se registró en las ciudades de Mexicali y Hermosillo, donde el precio por kilogramo de este alimento alcanzó 15.40 y 15.25 pesos, respectivamente; mientras que en la zona metropolitana de Puebla, Distrito Federal, Toluca, el kilogramo de tortilla se ubicó en 8.60, 9.21 y 9.36 pesos, respectivamente, siendo éstos los más bajos a nivel nacional.

De acuerdo con información del Banco de México, los precios de los alimentos continúan al alza. Sólo durante mayo, los índices de precios que corresponden a la canasta básica y a los alimentos crecieron 2.84 y 4.40 por ciento anual, respectivamente; por lo que, por segundo mes consecutivo, el índice de precios de los alimentos creció por arriba del índice nacional de precios al consumidor (INPC) que en el mismo mes reportó una tasa anual de 3.25 por ciento.

En mayo, el precio de la tortilla de maíz reportó un aumento de 13.77 por ciento anual, la mayor tasa desde abril de 2007 (13.88 por ciento anual), con lo que confirmó siete meses consecutivos de crecimiento, tres de ellos por arriba de 10 por ciento; en tanto que el precio del pan dulce creció 8.85 por ciento anual, retomando así su ritmo de crecimiento, el cual había reducido el mes anterior.

Se estima que el precio de importación será cada vez más alto a nivel mundial. Según la FAO, el costo global por la importación de alimentos en 2011 será de 21 por ciento más que en 2010, alcanzando un nuevo récord en el comercio internacional de alimentos de 1.29 billones de dólares. Países de bajos ingresos con déficit de alimentos y los menos desarrollados serán los más afectados con aumentos en los precios de importación de 27 y 30 por ciento, respectivamente.