Lunes 29 de diciembre de 2025, p. 18
Este año se encamina a consagrarse como el mejor de todos los tiempos para el peso mexicano.
De acuerdo con el Banco de México (BdeM), la moneda mexicana alcanzó una cotización de 17.8930 pesos por dólar spot al cierre del último viernes de 2025, lo que representa una apreciación nominal acumulada de 14.3 por ciento en el año, frente a los 20.8829 pesos por dólar en que cerró 2024.
El tipo de cambio tendrá su mejor rendimiento desde que se adoptó el régimen de libre flotación, en 1994, desbancando la ganancia de 13.01 por ciento que alcanzó en 2023.
A tres jornadas de que concluya 2025, la apreciación de la moneda nacional en el año contrasta con las expectativas del mercado de finales de 2024, cuando el consenso proyectaba el tipo de cambio en 20.69 pesos por dólar en el mercado al mayoreo.
Incluso si en las próximas tres sesiones que restan a 2025 el peso mexicano acumulara una depreciación de 1.2 por ciento frente al dólar, lograría un rendimiento anual histórico.
Ramsé Gutiérrez, codirector de inversiones de Franklin Templeton México, sostuvo que 2025 pinta para ser el mejor año de la historia para el peso mexicano, con la mayor revaluación porcentual en un año calendario.
Añadió que el panorama es distinto al que se estimaba hace 12 meses, e incluso frente al pronosticado a finales de septiembre pasado, cuando e esperaba que cerrara el año en 18.30 pesos por dólar en el mercado interbancario.
¿Qué lo mantuvo fuerte?
Gutiérrez explicó que los factores detrás de esta fortaleza son la debilidad global del dólar, presionado por el déficit fiscal de Estados Unidos, y las políticas de la administración actual, que han puesto a prueba su atractivo como activo de refugio.
El índice DXY, que mide el comportamiento de la moneda estadunidense frente a una canasta de seis divisas, acumula una caída de 9.41 por ciento en 2025, uno de sus peores desempeños desde 2003, lo que pone en duda su hegemonía.
Los inversionistas que apostaron por el carry trade (estrategia consistente en tomar dinero prestado de economías con bajas tasas de interés, como Japón o Suiza, para financiar inversiones en activos de mayor rendimiento en otros lugares, como acciones estadunidenses o peso mexicano) vieron en el diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos o Japón una oportunidad imperdible, pues 80 por ciento de las compraventas de dólares son especulativas. Este es otro elemento que explica la fortaleza del peso.
El diferencial de tasas aún es atractivo y mantiene el peso como una de las monedas favoritas para estrategias de rendimiento. Esta liquidez hizo favorita a la moneda mexicana entre los inversionistas.
Según datos del Banco Interamericano de Desarrollo, el peso cotiza las 24 horas al día, cinco días de la semana, en todo el mundo.
Otro elemento a favor fue la estabilidad macroeconómica de México, pese a su bajo crecimiento.
“Aunque pronosticar el tipo de cambio es una de las tareas más complejas, el peso ha sorprendido en 2025”, destacó Ramsé Gutiérrez. La gran incógnita es si logrará mantenerse fuerte en 2026, con la gran incertidumbre que rodea la renegociación del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá.












