La Paz., El gobierno de Bolivia declaró ayer una emergencia económica, financiera, energética y social y eliminó los subsidios a combustibles, cuyos precios se mantuvieron congelados durante los 20 años de gobierno del Movimiento al Socialismo. Decretó un aumento a la gasolina de casi el doble, a la vez que anunció un incremento salarial de 20 por ciento para compensar el impacto de la medida.

Choferes y organizaciones sociales rechazaron la decisión, al igual que los parlamentarios opositores, encabezados por el vicepresidente, Edman Lara, cada vez más distanciado del presidente Rodrigo Paz. Estados Unidos “acogió con satisfacción” las reformas económicas.

“Eliminar los subsidios mal diseñados no significa abandono, sino orden, justicia y una redistribución real y transparente”, declaró Paz. “Hemos heredado un país herido en su economía, herido en sus reservas, sin dólares, con inflación creciente, sin combustibles y con un Estado que fue vaciado por dentro”, añadió.

“Al pueblo, al que pediste su voto, con el que te comprometiste a trabajar, ahora lo estás traicionando” le dijo el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, Mario Argollo, y prometió “hacer frente a este decreto del hambre”.

El anuncio, realizado el miércoles en la noche, generó ayer caos en el comercio, largas colas y precios altos. El transporte público duplicó sus tarifas en respuesta y llamó a un paro este viernes.

“Paz se ha equivocado. Debían ser medidas paulatinas, no de golpe; es como si te operaran sin anestesia”, comentó un ciudadano.

“Rechazamos categóricamente el decreto supremo (…). Es una medida apresurada (...). le pedimos al presidente que reconsidere”, dijo Lara rodeado de parlamentarios de la oposición.

El líder de la alianza Libre, Jorge Tuto Quiroga, ex mandatario y ex candidato presidencial, que propuso eliminar las subvenciones durante su campaña, cuestionó la viabilidad financiera del incremento salarial anunciado como compensación.

Respaldo empresarial y de Estados Unidos

Los empresarios, en cambio, respaldaron a Paz. “Son medidas necesarias, se veían venir y es mejor que sean de shock. El ajuste salarial es una medida dura para los sectores empresariales, nos golpea a todos, pero el gobierno debe compensar”, señaló el presidente de la Cámara de Exportadores, Osvaldo Barriga.

“Aplaudimos los esfuerzos históricos del presidente Paz para abrir Bolivia al mundo comprometiéndose a reformas significativas”, declaró el secretario de Estado estadunidense, Marco Rubio, en un comunicado. “Reconocemos que el camino por delante no será fácil. El pueblo boliviano ha soportado años de estancamiento económico, corrupción y mala gestión”, acotó.