Pekín. China aseguró que se opone al “acoso unilateral” y reafirmó su apoyo a los países en la salvaguardia de su propia soberanía, comunicó el canciller del gigante asiático, Wang Yi, a su homólogo venezolano, Yván Gil, mientras el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, volvió a defender el diálogo como herramienta de la política internacional y expresó su preocupación por Latinoamérica frente a las agresiones de Estados Unidos.

Wang y Gil sostuvieron una llamada telefónica en la que reiteraron que Pekín y Caracas son socios estratégicos, y que la confianza y el apoyo mutuos son una tradición de los lazos bilaterales, detalló un comunicado de la cancillería china.

“China cree que la comunidad internacional entiende y apoya la posición de Venezuela en la defensa de sus legítimos derechos e intereses”, aseveró.

Lula, por su parte, se mostró preocupado por la situación en la región y por las acciones de su homólogo estadunidense, Donald Trump, que mantiene un poderoso despliegue militar en aguas internacionales del Caribe y el Pacífico oriental.

“Estoy preocupado por América Latina. Me preocupan las actitudes del presidente Trump hacia América Latina, sus amenazas. Vamos a tener que estar muy atentos a esta cuestión”, señaló.

Recordó que la región es pacífica y que carece de armas nucleares. “Y por eso hablé con el presidente Trump: ‘el poder de las palabras puede valer más que el poder de las armas’. Cuesta menos y lleva menos tiempo si estás dispuesto a hacerlo”, apuntó el mandatario brasileño.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, aseguró que está de acuerdo con la decisión de Trump de clasificar al fentanilo como arma de destrucción masiva.

“Yo estoy de acuerdo con Trump en que el fentanilo es el arma de destrucción masiva más letal que se cierne sobre la sociedad de Estados Unidos, que lo consume”, indicó el mandatario en su cuenta de X.

Agregó que Bogotá “colaborará con todo para evitar que lleguen insumos para su producción”, e instó a Washington a “cuidar que se deje de producir mayoritariamente” en ese país.

Más tarde, Petro señaló en X que el presidente venezolano, Nicolás Maduro “es dictador por concentrar poderes, no hay ninguna evidencia en Colombia de que sea narco. Esa es narrativa de Estados Unidos”.

En otro mensaje en la misma red, tras recordar que “México podría reclamar Texas, California, Florida, Nuevo México, porque hacían parte del territorio mexicano y fueron tomadas a la fuerza”, Petro anunció que invitó a la opositora venezolana María Corina Machado “a venir físicamente a Colombia” a dictar una conferencia en el Hay Festival, en Cartagena, y “podría subirse y bailar en la tarima un buen vallenato o una cumbia o un porro pelayero, y hablar conmigo de la paz del Caribe y no de invasiones”.

Los escritores Laura Restrepo, Giuseppe Caputo y Mikaelah Drullard, cancelaron su asistencia al festival en protesta por la invitación a Machado.

ONU pide moderación

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, pidió moderación y reducir inmediatamente la tensión entre Washington y Caracas para evitar una “mayor escalada”.

Guterres instó a ambos países que “cumplan con sus obligaciones en virtud del derecho internacional, incluida la Carta de la ONU y cualquier otro marco jurídico aplicable para salvaguardar la paz en la región”, señaló a la prensa su portavoz adjunto Farhan Haq.

Cuba rechazó la decisión de la Unión Europea de prorrogar las “sanciones y medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela, que son contrarias al derecho internacional y la Carta de la ONU”, comunicó el canciller Bruno Rodríguez en su cuenta de X.

“Estas acciones persiguen aumentar la presión contra el gobierno de la revolución bolivariana y chavista y sirve a los intereses agresivos y neocolonialistas estadunidenses”, agregó.

Los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), denunciaron la “grave, temeraria y supremacista” amenaza de Trump contra la república bolivariana.

En este contexto, Paraguay y Estados Unidos reforzarán su cooperación militar a través de una “alianza estratégica”. Al mismo tiempo, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, informó que expresó al enviado especial de Trump, John Coale, su disposición a trabajar con Washington para resolver la situación en torno a Venezuela.