
Viernes 3 de octubre de 2025, p. 10
“2 de octubre no se olvida”, resaltó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, al cumplirse 57 años de la matanza de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, hecho que ha calificado de una de las “mayores atrocidades” que vivió México en la segunda mitad del siglo XX.
Ayer expresó su solidaridad con víctimas y familiares, así con todos los presos políticos de entonces y reiteró el compromiso de no repetición que estableció hace un año en su primer decreto presidencial, cuando también la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, pidió perdón en nombre del Estado mexicano por esa represión, ordenada en 1968 por Gustavo Díaz Ordaz.
Sheinbaum Pardo resaltó que habrá “acercamiento con la Secretaría de Gobernación para todo lo que tiene que ver con el decreto”, en el que se admite “políticamente que los actos de violencia gubernamental perpetrados el 2 de octubre de 1968, en contra del heroico movimiento estudiantil, fueron constitutivos de un crimen de lesa humanidad, como fue reconocido por el entonces presidente de la República y comandante supremo de las fuerzas armadas, Gustavo Díaz Ordaz, durante la lectura de su quinto Informe de gobierno”. El mandatario declaro: “por mi parte, asumo íntegramente la responsabilidad: personal, ética, social, jurídica, política histórica, por las decisiones del gobierno en relación a los sucesos del año pasado”.
Resaltó que “la historia de represión asociada al primer periodo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) –antes del neoliberalismo–, es muy grande; hay muchos casos de represión a movimientos sociales, sindicales, mineros, ferrocarriles, presos políticos” y está también la desaparición forzada de personas por motivos políticos”. Eso, sostuvo, “era autoritarismo”.
También explicó que se decidió blindar Palacio Nacional y otros monumentos porque “en distintas manifestaciones, desde que fui jefa de Gobierno, hay estos grupos que se cubren la cara y hacen acciones con artefactos peligrosos y muchas veces han pretendido quemar la puerta de Palacio”. Obviamente, precisó, “no se pone para la manifestación pacífica” por los hechos ocurridos hace 57 años.