Se busca determinar el grado de afectación interna: Virginia Sendel, de la Fundación Michou y Mau
Jueves 18 de septiembre de 2025, p. 31
A la pequeña Jazlyn Azuleth, de dos años, quien pese a que fue protegida por su abuela tras la explosión de una pipa de gas LP en el puente de La Concordia, en Iztapalapa, se le realizan diversos estudios médicos integrales, entre ellos exámenes cerebrales y de vías respiratorias, este último de la mayor relevancia, para determinar el grado del daño, ya que sufrió quemaduras en 25 por ciento de su cuerpo, informó la presidenta de la Fundación Michou y Mau para Niños Quemados, Virginia Sendel e Iturbide.
En entrevista, Sendel señaló que el estado de salud de la niña continúa siendo crítico estable, y que se está a la espera de los resultados de los estudios que se le realizan, los cuales “suelen ser complejos y duran varios días; esperamos que mañana (hoy) tengamos resultados más completos porque son muy detallados”.
Asimismo, explicó que es necesario evaluar en qué áreas del cuerpo se requerirán injertos y de qué tipo, porque “son muchas cosas”. Enfatizó que lo que preocupa básicamente es determinar la afectación interna.
Señaló que en el Centro Médico Siglo XXI hicieron un buen trabajo; sin embargo, el traslado el lunes pasado al Shriners Hospitals for Children, en Galveston, Texas, Estados Unidos –con el que se tiene convenio–, fue con el propósito de que estuviera en un lugar de alta especialidad, ya que es uno de los mejores nosocomios del mundo en este tipo de atenciones, en el cual tienen un voluntariado muy grande, donde se les proporciona desde medicamento hasta ropa de manera gratuita. “Están muy bien atendidos”.