Sábado 16 de agosto de 2025, p. 8
La adaptación del pleno del Senado para que rindan protesta casi 900 juzgadores el próximo 1º de septiembre sigue siendo un reto para la directiva de esa cámara, que aún no resuelve la logística de la sesión solemne, que comenzará a las ocho de la noche y se prolongará hasta la madrugada.
Aunque la mesa directiva que encabeza Gerardo Fernández Noroña ya acordó rentar un salón en un hotel cercano a la sede de Reforma e Insurgentes, que contará con butacas y pantallas con la transmisión en vivo de la sesión para que los familiares de jueces, magistrados y ministros sigan desde ahí la ceremonia, aún faltan detalles sobre cómo irán entrando al reciento legislativo los 881 nuevos integrantes del Poder Judicial.
El vicecoordinador de Morena, Ignacio Mier, explicó que se decidió que la toma de protesta sea por tandas o turnos, ya que no caben en el salón de plenos los cientos de juzgadores electos por el voto ciudadano en junio pasado.
Dentro del recinto, donde estarán los 128 senadores en sus respectivos escaños, se colocarán 40 sillas, que sumadas a 90 lugares en los palcos, dan un total de 130, que son podrán utilizarse para quienes rendirán protesta y otros invitados.
Los primeros en ingresar al recinto serán las cinco ministras y cuatro ministros que conformarán la Suprema Corte. En su caso se prevé que pasen al pleno con uno o dos familiares, al igual que los dos magistrados de sala superior y los 15 de salas regionales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y los cinco del Tribunal de Disciplina Judicial.
La situación cambia con los 474 magistrados de tribunales colegiados de circuito y de apelación y los 386 jueces de distrito, que por lo numeroso, no cabrían en el salón de sesiones y pasarán por turnos.
“Sería absolutamente injusto que no les diéramos la oportunidad de venir acompañados de familiares o amigos en este momento histórico de sus carreras que van a vivir. Resolver eso es un reto logístico”, comentó el senador Jorge Carlos Ramírez Marín.
Parte de la problemática se zanjará con el alquiler de espacios en el hotel Sevilla Palace, pero se deberán adaptar salones cercanos a la cámara para quienes esperarán turno durante el desfile de juristas en lo que será una larga noche.
Se tiene preparada una sesión solemne austera, que, según el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, “va a salir al tiro”,pese a que los opositores a la reforma judicial intentarán descarrilarla.
“Si la oposición no decide hacer tiznaderas, va a salir muy bien, y si las hacen, de todos modos va a salir muy bien”, sostuvo.