Martes 29 de julio de 2025, p. 27
Nuevo Laredo, Tamps., El comerciante Miguel Ríos García acusó que los efectivos del Ejército Mexicano que robaron a su hijo y a dos empleados 50 mil pesos en efectivo, mil dólares y varios teléfonos celulares, durante una revisión de rutina el 25 de julio, sólo les devolvieron una parte y el resto quedó condicionado a una negociación informal con el mando militar.
“Me regresaron mil dólares y dos mil pesos, la otra parte dijeron que –la entregarían– el sábado, luego que hasta el lunes. Pero el coronel (David González Carrasco, comandante del 16 Regimiento de Caballería Motorizada) se comprometió a regresar todo”, precisó en entrevista.
Además, hasta el momento, no se le ha informado de alguna sanción administrativa ni proceso disciplinario contra los militares que participaron en el hurto, que pertenecen al 16 Regimiento de Caballería Motorizada. Tampoco se ha formalizado la reparación de daños a su vehículo, el cual resultó afectado durante una persecución de más de tres horas por distintas calles de Nuevo Laredo.
El caso se viralizó en redes sociales cuando Ríos García transmitió en vivo la persecución a un convoy militar que huía tras cometer el robo. La camioneta del denunciante fue chocada por los soldados, y al menos otros dos vehículos también resultaron dañados.
El comerciante describió que “los soldados se fueron en sentido contrario, iban muy rápido, chocaron varios carros y no se pararon. Hay videos donde se ve cómo impactaron una troca café”.
La persecución concluyó cuando ciudadanos interceptaron a los efectivos castrenses en el bulevar Adolfo Ruiz Cortines. Ahí, bajo la presión social, devolvieron una parte del dinero y, de acuerdo con testigos, admitieron que ya había sido repartido entre los integrantes del convoy.
Ríos García también denunció que los efectivos castrenses amenazaron a su hijo y a sus trabajadores. Señaló que les advirtieron que podrían ser levantados o inculpados con cargos falsos si continuaban denunciando.