Inmigrantes indocumentados en EU pagaron al fisco mil 700 mdd de impuestos en 2024 y aportan a servicios públicos de los cuales están excluidos

ermitan ustedes que por esta vez cambiemos el orden de los factores (es decir el formato de la columneta), sin alterar el producto. Entonces, empecemos primero, dando satisfacción a un atento y acucioso lector, que no sólo se chutó a primera hora de la mañana del pasado lunes una plática con la columneta, sino que además, le llamó seriamente la atención y le hizo una corrección en la cifra que ésta anotaba sobre el requisito económico que tienen que cubrir los terrícolas que aspiren a ser considerados, “los millonarios de Forbes”.
La columneta agradecida, hace lo que es debido, reconocer la sabia reconversión y transcribir textualmente, el dicho del señor doctor Leonardo Moctezuma: “Ortiz: considero que ahora sí se te chisporroteó la cifra. Los millonarios de Forbes son los que manifiestan fortunas de mil, millones de dólares, no de dos millones”. En verdad, gracias. Qué tal que un lector se confía en el dicho de la columneta y acepta participar en un negocio sobre esas bases. Por favor, si no hay inconveniente, facilítame tu teléfono.
Osadamente me atrevo a decir que me gustaría comentar la última decisión del señor Donald Trump (por supuesto unipersonal), que ha tomado sobre las relaciones del país que gobierna y el resto del planeta.
Me refiero obviamente a la obligación de los extranjeros, e incluso nacionales, que realizan trabajos (que no harían ni los negros
, según la ingrata opinión de un conocido inimputable, cuyas iniciales son las siguientes: Vicente Fox Quesada) y ganan, obviamente, el estipendio que legalmente está estipulado. De ese dinero, que ya es legalmente suyo, ellos envían divisas a sus familiares para que puedan vivir y dar a sus hijos mejores oportunidades. Podría intentar un largo discurso con la intención de exhibir al señor Trump o, mejor dicho, diagnosticarlo, pero en vez, intentaré concretarme tan sólo a unas cuantas palabras: insania, ignorancia y desequilibro emocional.
Pero más allá de una opinión personal, lo que resulta definitivo es brindar datos comprobables. Los organismos estadunidenses que emitieron los que voy a proporcionar, están obligados a corroborar la información que se les requiera.
Veamos: Es a don Braulio Carbajal a quien debemos de nueva cuenta la siguiente información. Los salarios de los migrantes en Estados Unidos, durante 2024, sumaron 373 mil 726 millones de dólares. Esta cifra representó un aumento de 9.6 por ciento en relación con el año anterior y 61.8 por ciento del ingreso correspondió a mexicanos sin residencia. Ojo, mucho ojo: los inmigrantes indocumentados, pagaron al fisco mil 700 millones de dólares de impuestos, y cada millón de migrantes, sin papeles, contribuyó con 8 mil 900 millones a los servicios públicos. (Información del Instituto de Política Fiscal y Política Económica de Estados Unidos).
Marco Guzmán, analista principal del mencionado instituto, agrega: más de un tercio de lo que pagan los migrantes se dedica a financiar los sistemas de pensiones y del Medicare, de los cuales ellos están excluidos.
A la columneta se le ocurrió un efectivo plan para que podamos transmitir estos y otros datos masivamente. Lo platicamos luego.
Por el bien de todos, a votar el 1º de junio.