Lunes 19 de mayo de 2025, p. 10
En 2024, la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno (SABG) –antes, Secretaría de la Función Pública– combinó la continuidad de la austeridad republicana con un aumento significativo del gasto a corto plazo.
Según el Sexto Informe de Austeridad Republicana de la dependencia, en el último año de gobierno del ex presidente Andrés Manuel López Obrador ejerció 2 mil 438 millones de pesos lo que, al descontar la inflación, representa apenas 0.3 por ciento más que en 2018, el último año del sexenio de Enrique Peña Nieto, cuando ascendió a mil 824 millones de pesos. Así, el gasto se mantuvo estable a lo largo del gobierno, en línea con los principios que buscan combatir la desigualdad social, la corrupción y el despilfarro.
Sin embargo, al analizar el comportamiento del gasto a corto plazo, se observa una dinámica distinta. El gasto total de la depedencia en 2024 experimentó un incremento real de 9.8 por ciento en comparación con 2023, cuando fue de 2 mil 116 millones de pesos.
De acuerdo con el informe, el aumento se justifica, en parte, por la restructuración de la dependencia y la reorganización de los órganos internos de control, los cuales son procesos derivados de las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Estas modificaciones implicaron la transferencia de plazas y la redefinición de atribuciones, lo que impactó en la asignación y el ejercicio de los recursos.
El documento detalla que en servicios personales se ejercieron mil 758 millones de pesos en 2024, lo que representa un alza real de 29.5 por ciento respecto a los mil 18 millones de 2018. La secretaría dijo que el aumento se debió a la transferencia de plazas de órganos internos de control de otras dependencias y a la actualización de los tabuladores de sueldos y salarios autorizada por Hacienda.
En contraste, el gasto de operación mostró una baja. En 2024 se ejercieron 647 millones de pesos, en comparación con los 735 millones de 2018, lo que representa una disminución real de 34 por ciento. La baja es atribuida a las medidas de austeridad, como que no se contrató telefonía celular para el personal, la eliminación de arrendamientos de inmuebles y la reducción de la flotilla de vehículos arrendados.