Washington. La ministra de Finanzas de Canadá, Chrystia Freeland, anunció ayer su renuncia por diferencias con el primer ministro, Justin Trudeau, en un contexto de amenazas arancelarias por parte del futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El viernes usted me dijo que ya no me quería como su ministra de Finanzas y me ofreció otro cargo en el gabinete. Luego de pensarlo, concluí que el camino viable y honesto es renunciar, dijo Freeland en una misiva a Trudeau.

La dimisión de Freeland sorprendió al país y generó dudas sobre cuánto tiempo más podrá permanecer el propio Trudeau en el cargo.

Los medios de comunicación nacionales informaron que Freeland y Trudeau se habían enfrentado por una propuesta gubernamental de exenciones fiscales temporales y otras medidas de gasto.

Asimismo, Freeland reconoció que en las últimas semanas hubo desacuerdos con Trudeau sobre cuál es el mejor camino a seguir para Canadá a fin de hacer frente al riesgo que supondrá la imposición de aranceles por parte de la próxima administración de Estados Unidos.

Alerta sobre agresivo nacionalismo de EU

En su carta de renuncia, Freeland calificó la política de Trump de agresivo nacionalismo económico y alertó que la amenaza de aplicar aranceles hasta de 25 por ciento será un severo desafío para su país. Necesitamos tomarnos esta amenaza muy seriamente, afirmó.

Canadá ganará si somos fuertes, inteligentes y estamos unidos. Es esta convicción la que ha impulsado mis esfuerzos para gestionar nuestro gasto de manera que nos dé la flexibilidad que necesitaremos para afrontar los graves desafíos que presenta Estados Unidos, remarcó Freeland, quien aseguró que contenderá en las próximas elecciones legislativas.

Eso significa mantener las reservas que podamos necesitar para una guerra arancelaria y evitar costosos trucos políticos que no podemos permitirnos, escribió.