La entrega y revisión de documentos, sellos y firmas, que hasta ahora han sido el cuello de botella en la entrega de medicamentos y demás insumos para la salud en las instituciones, se prevé subsanar en la primera compra consolidada de medicamentos de este sexenio con la digitalización que estará presente en todo el proceso.

Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex), encargado de llevar a cabo la compra y distribución de los productos farmacéuticos, publicó los lineamientos que deberán seguir los proveedores e instituciones participantes.

Uno de los problemas constantes de las adquisiciones ha estado en el momento de la recepción en almacenes y la entrega a los hospitales, por el cúmulo de documentos que los proveedores están obligados a presentar con sellos y firmas, los cuales, además, han sido distintos para las diversas instituciones.

Debido a que ha sido un trabajo manual, la revisión y validación tomaba ocho horas o más antes de que proveedores y operadores logísticos (empresas distribuidoras)pudieran entregar los insumos. Con el nuevo esquema para la compra y distribución, el gobierno federal se ha planteado digitalizar la cadena completa, desde la investigación de mercado hasta la entrega de los productos en el punto final.

En el caso de las entregas, los lineamientos establecen que los proveedores envíen, a través de la plataforma, los papeles para su revisión y visto bueno, los cuales, además, serán los mismos para todas las instituciones. Una vez cubierto este requisito se programarán las entregas en almacenes o unidades médicas. Otra novedad de la compra consolidada 2025-2026, cuya convocatoria está próxima a ser publicada –de acuerdo con el subsecretario de Salud, Eduardo Clark–, es que habrá varios centros de distribución y no sólo el Centro Federal de Distribución (Cefedis) ubicado en Huehuetoca, estado de México.

Los lineamientos señalan que el objetivo es minimizar los riesgos asociados a un único centro de distribución, operando en forma paralela y distribuida para evitar un punto único de fallo.

Puntualizan que Birmex tendrá el control de todos los centros de distribución a través de un inventario virtual. Cada uno de esos centros se encargará de recolectar y redistribuir los excedentes de insumos y de aquellos con riesgo de mermas.