La Paz., El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) de Bolivia desconoció ayer la dirigencia del ex mandatario Evo Morales al frente del partido oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS), lo que supone un nuevo revés en la búsqueda de ser candidato para las elecciones de 2025, Y reconoce a Grover García, afín al actual mandatario Luis Arce, como presidente de la formación, informó el diario Brújula Digital.

Se tienen como válidos todos los actos de ejecución, incluido el Congreso Nacional Ordinario del MAS-IPSP, efectuado en El Alto, departamento de La Paz, del 3 al 5 de mayo de 2024, convocado por las organizaciones fundadoras ahora accionantes, así como las determinaciones asumidas en ese acto, señaló la resolución del TCP.

De esta manera, se pone fin a la disputa entre la agrupación a favor del líder cocalero, que defendía el congreso de Lauca Ñ de 2023, en el departamento de Cochabamba, donde Morales fue relecto líder partidario, además de candidato, y el sector del presidente Luis Arce, que impulsaba el congreso de El Alto y la renovación en la dirigencia del movimiento.

Ante esta sentencia, un grupo afín a Arce celebró con cánticos en la plaza común del palacio de gobierno y el Congreso.

En la misma lógica de la guerra jurídica aplicada en Ecuador, el gobierno de Luis Arce da un golpe a la revolución y el proceso de cambio, presionando a la sala constitucional IV para que entregue las siglas del MAS-IPSP a través de una sentencia inconstitucional, ilegal e ilegítima, declaró Evo Morales en su perfil de la red social X.

Por este fallo, con folio 0776/2024 del TCP, el ex dirigente del MAS también protestó: ¿Cómo una sentencia judicial puede terminar dirimiendo algo que corresponde a la decisión democrática de los militantes de la fuerza política.

En tanto, la policía del país andino detuvo a varios dirigentes evistas luego de acusarlos de terrorismo por organizar los bloqueos que durante casi un mes tuvieron paralizadas diversas carreteras.

Los detenidos son Humberto Claros y Ramiro Cucho, quienes encabezaron las obstrucciones viales que desde el departamento de Cochabamba, bastión de Morales, paralizó el acceso al este y oeste de Bolivia, produciéndose enfrentamientos con las autoridades de seguridad pública e incluso la toma de rehenes y de regimientos militares.

A Claros, líder de un sindicato campesino, y Cucho, al frente de una organización de pueblos indígenas, se les acusó también de alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado, tráfico y tenencia ilícita de armas, asociación para delinquir y secuestro, por citar algunos de los cargos penales.

En otro de los seis registros que se realizaron antenoche en Sopocachi y San Pedro de Sorata, ambas en La Paz; Potosí y Santa Cruz, y por el mismo caso de los bloqueos carreteros, agentes catearon la vivienda del ex ministro de la presidencia Juan Ramón Quintana, y encontraron dos cajas de documentación, además de un disco duro, informaron medios locales.

Por su parte, el viceministro del Interior, Jhonny Aguilera, confirmó que se desconoce el paradero de Quintana, y no cuentan con información sobre su posible salida del país, por lo que la pesquisa de su paradero sigue en territorio boliviano.