Puerto Príncipe., Casi la mitad de la población de Haití tiene graves problemas para acceder a alimentos diarios mientras la violencia de las pandillas se extiende por todo el país, aseguraron organizaciones internacionales, al tiempo que más de 33 mil personas huyeron de la zona metropolitana de Puerto Príncipe en los recientes 15 días para alejarse de la hostilidad de los pandilleros.

El aumento del hambre está avivando la crisis de seguridad que está destrozando el país. Necesitamos medidas urgentes ahora; esperar a responder a gran escala no es una opción, explicó Jean-Martin Bauer, director del Programa Mundial de Alimentos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para Haití.

La inflación y las malas cosechas también contribuyeron a llevar a Haití a sus peores niveles jamás registrados, detallaron las organizaciones.

La Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria, organización que establece la escala utilizada por la ONU y los gobiernos para evaluar el hambre, informó que alrededor de 4.97 millones de personas de una población de al menos 11.5 millones se enfrentan a niveles de crisis o peores de inseguridad alimentaria.

En tanto, las pandillas saquean casas e instituciones del Estado, de acuerdo con un nuevo informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU.

Los ataques y la anarquía generalizada empujan cada vez a más personas a salir de la capital para encontrar refugio en las provincias, arriesgándose a pasar por las rutas controladas por las pandillas, afirmó la OIM antier por la noche.

En tanto, Luis Abinader, presidente de República Dominicana, informó que continuará con la deportación de ciudadanos haitianos y desestimó la autorización de campos de refugiados en su territorio.

Durante una entrevista con el periodista británico Stephen Sackur en el programa de la BBC HARDtalk, el gobernante reiteró que su administración tiene la responsabilidad de hacer todo lo necesario para proteger la seguridad nacional y su soberanía.

Mi reputación es aplicar la Constitución y la ley, respondió Abinader respecto de las críticas sobre supuesto racismo dominicano.

El mandatario, que negó dichas acusaciones, puntualizó que en Santo Domingo se aplican sus leyes de manera equitativa, sin discriminación racial.