Monclova, Coah., Un juez vinculó a proceso penal a siete personas por la tortura y muerte de una cría hembra de oso negro, especie en extinción, el pasado 22 de agosto en el municipio de Castaños.

La osezna llegó al ejido Santa Cecilia en la fecha mencionada; pobladores del lugar la ataron, torturaron y asfixiaron en presencia de policías municipales.

La Procuraduría de Protección al Ambiente del estado presentó una denuncia ante la fiscalía estatal y el Ministerio Público identificó a dos civiles y cinco agentes como presuntos responsables. Se les atribuye el delito de maltrato animal.

Los uniformados, quienes ya fueron separados de sus cargos, también enfrentan cargos por ocultación de indicio, debido a que pretendieron encubrir a los agresores de la cría que tenía apenas cinco meses de edad, de acuerdo con la causa penal 1034/2022.

Los imputados llevarán el proceso en libertad y fueron identificados como Anselmo y Baldomero, habitantes de la localidad, así como Mario Alberto, Dalia Yohana, Manuel de Jesús, Rogelio, y José Iván, quienes pertenecían a la policía preventiva municipal.

La crueldad contra el animal fue difundida a finales del mes pasado en redes sociales, por lo que causó indignación. En las imágenes se observa a tres adultos y dos menores que mantienen a la osa amarrada de patas, hocico y cuello mientras tiran de las cuerdas. Otras personas observan y los policías ríen.

El oso negro es una especie protegida por la norma oficial mexicana NOM-059-Semarnat-2010, por lo que está prohibida su caza. En el año se han reportado por lo menos seis muertes de estos animales relacionadas con humanos; las otras cinco fueron por atropellamiento.