Londres. Los 56 millones de habitantes de Inglaterra volverán a confinarse a partir del jueves y hasta el 2 de diciembre, en un intento por frenar el avance de la pandemia de coronavirus, anunció ayer el primer ministro británico, Boris Johnson.

El mismo día en que Gran Bretaña superó el millón de casos confirmados de Covid-19, Johnson, quien estuvo hospitalizado por la enfermedad, anunció una nueva cuarentena tras ser advertido que, si no tomaba medidas severas contra un repunte de contagios, los nosocomios estarían sobrepasados en cuestión de semanas.

Tenemos que ser humildes ante la naturaleza, afirmó el premier en rueda de prensa y agregó que todos los comercios no esenciales cerrarán y los ingleses no podrán salir de casa salvo para comprar comida o acudir al médico. Escuelas y universidades seguirán, sin embargo, abiertas.

Un cierre nacional representa un cambio drástico de política para Johnson, quien había dicho durante meses que no sería necesario. Los gobiernos de Escocia, Gales e Irlanda del Norte reimpusieron cierres parciales.

Reino Unido, que tiene el mayor saldo oficial de muertes de Covid-19 en Europa con más de 46 mil, enfrenta más de 20 mil casos nuevos por día y los científicos han advertido que incluso podría exceder el peor escenario de 80 mil fallecidos.

Se supera un millón de decesos

La pandemia del nuevo coronavirus ha provocado al menos un millón 193 mil muertos y más de 45 millones 930 mil casos, de acuerdo con el conteo de la Universidad Johns Hopkins.

Austria anunció un nuevo confinamiento a partir del martes, mientras Grecia y Portugal dictaron una cuarentena parcial.

En Austria se aplicará un toque de queda entre las 20 y las 6 horas, así como el cierre de restaurantes, hoteles, instituciones culturales y deportivas hasta finales de noviembre, informó el canciller conservador Sebastian Kurz en conferencia de prensa en Viena.

El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, anunció restricciones a los desplazamientos durante la noche y el cierre de restaurantes, bares y lugares de entretenimiento en Atenas y otras ciudades del país a partir del martes.

Portugal aplicará a partir del miércoles un nuevo confinamiento, que afectará a alrededor de 70 por ciento de la población y que será menos estricto que el de la primavera boreal, para frenar el coronavirus, anunció anoche el primer ministro Antonio Costa.

Menos de seis meses después del final de la primera cuarentena, los franceses deben permanecer en sus casas este fin de semana, pero una parte de la población, en particular pequeños comerciantes, apoyados por alcaldes, se muestran menos inclinados a cumplir las reglas.

Protestas en España

Varias ciudades españolas, entre ellas Madrid y Barcelona, tuvieron ayer protestas violentas contra las restricciones impuestas, en algunos casos también ocurrieron saqueos.

Italia informó más de 31 mil nuevos contagios de coronavirus detectados en las últimas 24 horas. Mientras Darío Nardella, alcalde de la ciudad de Florencia, protestó enérgicamente después de que estallaron varios enfrentamientos entre la policía y manifestantes que se oponían a las medidas anti-Covid del gobierno.

El ministro brasileño de Salud, el general Eduardo Pazuello, quien dio positivo hace 10 días, fue internado la noche del viernes con un cuadro de deshidratación y espera recibir el alta en breve.

En tanto, varias protestas se registraban simultáneamente en diversos penales de la provincia de Buenos Aires con decenas de presos agolpándose en los tejados de las instalaciones para pedir que se reanuden las visitas de familiares, suspendidas durante la pandemia.

Estados Unidos registró 9.1 millones de infecciones y 230 mil decesos, mientras América Latina y el Caribe, la región más golpeada, sumó 11.2 millones de contagios y más de 400 mil muertes por el virus.