La bancada del PRI en la Comisión Permanente presentó un punto de acuerdo para solicitar a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) que revise las reglas de operación del Programa Pensión para Adultos Mayores, porque los beneficiarios tienen que esperar hasta cuatro horas para que se les entregue el apoyo de mil 160 pesos cada dos meses, y muchos de ellos tienen dificultades para caminar.

Se destaca en la propuesta presentada que con el cambio a las reglas de operación de ese programa, para que atendiera a la población de 65 años que no recibe ingreso por concepto de pensión o jubilación de tipo contributivo superior a mil 92 pesos mensuales, le dio apretura al sistema que tiene como objetivo contribuir a dotar de esquemas de seguridad social que protejan el bienestar socioeconómico de la población en situación de carencia o pobreza, mediante el aseguramiento de un ingreso mínimo, de 580 pesos mensuales, pero entregándoselos cada dos meses.

Dentro de las reglas de operación del programa se establece que la entrega de los apoyos económicos será en función de la infraestructura bancaria disponible, y se utilizan dos esquemas diferenciados: entrega de apoyos en efectivo, en la cual los beneficiarios deberán acudir a las sedes de atención para recibir los apoyos, con entregas bimestrales, presentando la documentación necesaria, y por transferencia bancaria, en la que recibirán un depósito correspondiente a los apoyos económicos, mediante una tarjeta electrónica proporcionada por la Sedesol.

Fallas en algunas entidades

Sin embargo, en diversos estados del país en los meses recientes se han presentado deficiencias en la operación del programa, pues la Federación no cumple con la suficiente emisión de tarjetas en tiempo y forma, por consecuencia, los beneficiarios tienen que esperar hasta cuatro horas formados fuera de la delegación para obetener el apoyo. Dicha práctica no toma en cuenta las condiciones y circunstancias a las que se exponen nuestros adultos mayores.

Refieren en el punto de acuerdo que 26.9 por ciento de las personas adultos mayores tiene alguna dificultad para realizar las actividades básicas de la vida diaria (bañarse, vestirse, utilizar el sanitario, caminar, acostarse y levantarse, y 24.6 por ciento tiene dificultades para la preparación y compra de alimentos, administración de medicamentos o el manejo de dinero.

Por ello, el PRI planteó que se revisen las reglas de operación de ese programa para que los adultos mayores no tengan que exponerse cuando acudan a recibir ese apoyo.