Morelia, Mich.

En redes sociales se dio a conocer un mensaje en video del ex líder de los grupos de autodefensa de Michoacán José Manuel Mireles Valverde, grabado en abril de 2014, el cual pretendía que se difundiera después de su muerte, con el argumento de que el crimen organizado, los gobiernos federal y estatal, e incluso su esposa, pretendían eliminarlo.

La página de YouTube Grillonautas 2 dio a conocer el mensaje completo en el cual Mireles Valverde sostiene que perdió todo el apoyo del gobierno federal después de que tomó Tancítaro con un grupo de autodefensas, el 16 de noviembre de 2013.

En noviembre de 2013, señala Mireles Valverde, se reunió en Ciudad de México con funcionarios federales, entre ellos el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quienes le aprobaron hacer una limpieza del crimen organizado en todo Michoacán y restablecer el estado de derecho, para lo cual le ofrecieron liberar a todos los autodefensas presos, que éstos nombraran a un solo interlocutor, que sería él mismo, y la detención de 20 cabecillas de grupos delincuenciales.

Dijo que por un acuerdo no escrito, el gobierno federal se comprometió a entregarles una unidad blindada, y otro no escrito es que ya no nos íbamos a mover a otros municipios, y en caso de avanzar debería ser conjuntamente con la Federación.

En esa reunión, José Manuel Mireles dijo que tenía previsto tomar Los Reyes, Aquila, Coahuayana, Uruapan, Ario de Rosales y Apatzingán. Le pidieron que esperara una semana. No hubo respuesta. Optamos por tomar Tancítaro (el 16 de noviembre de 2013) ante la demanda de auxilio. El día que decidimos entrar apareció el cadáver de una niña de siete años, hija de un aguacatero, y a su hermana de nueve años la desaparecieron, a pesar de que habían pagado 23 millones de pesos.

Recordó que su grupo después tomó El Chauz, municipio de La Huacana, y Churumuco, pero autoridades federales le reclamaron por avanzar sin dar aviso.

El 5 de enero de 2014 se accidentó cuando la avioneta en la que viajaba aterrizó en una carretera de El Chauz. “Desde ese momento mis enemigos naturales dejaron de ser Los Templarios, y se sumaron los gobiernos del estado y federal, así como algunos coordinadores de autodefensas, incluso mi propia esposa”, dijo.