Se estrena el 14 de noviembre en el Centro Cultural Telmex

Los miserables, obra que refleja no sólo la carencia material, sino la espiritual

JUAN JOSE OLIVARES

El director Mariano Detry explica de qué se trata el número. Los actores-cantantes, alrededor de 35, toman sus lugares en el piso giratorio del salón de ensayos del teatro Uno del Centro Cultural Telmex. La pieza que interpretarán se llama Al final del día, la cual deviene angelical coro de susurros femeninos y masculinos. Es el ensayo de la obra universal de Victor Hugo, Los miserables, convertido en uno de los musicales más esperados por el público mexicano, que el próximo 14 de noviembre brillará en el mencionado teatro de avenida Chapultepec.

"Los miserables es la obra de mi vida, aunque cada puesta es como un hijo, pero francamente como este montaje musical no hay dos", dice el productor Morris Gilbert al término del ensayo, que fue como "la versión desenchufada de la obra".

"Yo lo quería hacer desde hace 15 años, pero antes no existía una empresa como CIE que se aventara un tiro de este tamaño. Uno de nuestros primeros proyectos era Los miserables, pero mientras, hicimos siete musicales más. Llegó la hora del más importante de todos", agrega el productor.

La puesta es una producción de Australia. Luego CIE la compró para Argentina, Brasil y ahora para México, donde se ha restructurado y adaptado.

"La obra -asegura Gilbert- no habla de miseria material, habla de la espiritual del ser humano. Cuenta una epopeya a través de la vida. Es universal y atemporal, la gente siempre se sentirá identificada con esta obra, porque a fin de cuentas, saca lo mejor de nosotros".

Cuenta Morris que Los miserables es una patente internacional, por lo que se tiene que respetar la obra tal y como es. No obstante, "aunque el montaje es igual como cualquier otro en el mundo, toma un color muy nacional y muy específico, ya que como maneja emociones antes que ninguna otra cosa, el temperamento en cada país es diferente, y con los mexicanos eso se refleja".

Se le cuestiona sobre si las caras conocidas de la obra se reclutaron para ganar audiencia. Responde: ''Si analizas el reparto te das cuenta que es muy híbrido, hay gente conocida, y otras que ya han trabajado en otros musicales nuestros, pero no tuvimos como criterio para reclutar a los artistas el hecho de que fueran rostros conocidos. Siempre nos fijamos en el talento. Si son conocidos obviamente nos ayudan a vender boletos y no vamos a decir que no nos gusta la idea, pero ese no es el criterio. De entrada, pueden ver a Ernesto D'Alessio -hijito de la leona dormida- y lo bien que canta, y está aquí por su voz, por ninguna otra razón, porque se lo ganó en la audición".

Añade: ''Cuando se hacen las audiciones, los directores que las realizan no conocen a nadie porque vienen de fuera y les da lo mismo si eres famoso o si no te conoce nadie; tan es así que en la obra hay gente que nunca se había parado en un escenario. Hay jóvenes de 23 y 24 años que es la primera vez que hacen algo como esto; se han preparado a conciencia porque ya saben que ahora sí hay una fuente de trabajo digna para los musicales en México".

Gilbert asevera que no fue fácil reunir a este reparto, pero lo más difícil "fue descifrar a quién le dábamos los personajes principales, porque para cada uno de éstos teníamos a dos o tres candidatos, algo que a los directores ingleses dejó pasmados. Los actores podían estar en uno u otro personaje".

En Los miserables estarán 37 actores en escena. Tiene un taller de vestuario de "kilómetros y kilómetros, todo el teatro está lleno de racs de vestuario, todos los departamentos trabajan a todo vapor".

Morris explica que no habrá cambios de escenografía en el sentido convencional de la palabra, sino que se cambia el espacio según cambie la historia. Se cambia de ciudad o lugar para relatar visualmente. Los actores se cambiarán en promedio como 25 veces de vestuario. "Esta es un historia que es contada por el ensamble de voces, incluso los personajes principales están en escena haciendo a otros personajes".

Carlos Vittori, Fazio Galván, Roberto Blandón, Laura Cortés, Claudia Cota y Luis René Aguirre son algunos de los estelares que ya han sido protagonistas en varios musicales.