Culiacán, Sin., Mientras el resto de la ciudad celebraba la Nochebuena entre música, luces y reuniones familiares, decenas de familias desplazadas por la violencia del municipio de Badiraguato vivieron una realidad opuesta.

Asentados en un predio de la colonia Montesierra, en el norte de Culiacán, este grupo pasó una Navidad marcada por la incertidumbre, la nostalgia y el recuerdo de los hogares que se vieron obligados a abandonar.

Es la realidad del desplazamiento en un lugar improvisado donde antes solo había tierra; hoy se encuentran personas que duermen en el suelo, atrás quedaron las camas que alguna vez tuvieron en sus comunidades de origen, enfrentando las bajas temperaturas con apenas lo básico.

Los ecos de los festejos de las colonias aledañas contrastaban con el silencio de quienes evocaban a sus seres queridos y la vida que la violencia les arrebató.

Para los más pequeños, la llegada de Santa Clós fue austera pues este año no hubo bicicletas ni regalos tecnológicos; la alegría se buscó en juegos de mesa y juguetes sencillos. A pesar de las carencias, los infantes buscaron momentos de felicidad, ajenos a la preocupación de sus padres.

Para los adultos, la jornada no fue de descanso ya que la celebración estuvo empañada por el miedo a que las autoridades aprovecharan la fecha para desalojar el predio.

Pobladores entrevistados –que se mantienen en el anonimato debido a denuncias ante la Fiscalía General del Estado por presunto despojo– relataron que su cena consistió apenas en frijoles y nopalitos. Varias personas con un poco más de suerte lograron compartir un pollo.

La sensación generalizada entre los habitantes de Montesierra es de abandono. Aseguran sentirse desamparados por las autoridades estatales y rechazan trasladarse a un albergue colectivo. “Venimos de comunidades donde teníamos libertad y privacidad; un espacio colectivo no es la solución para reconstruir nuestra vida", reprocharon.

En el predio habitan adultos mayores, personas con discapacidad y numerosos niños, que requieren con urgencia colchonetas y catres para enfrentar las gélidas noches de invierno en Sinaloa.

Sin embargo, el mayor deseo de estas familias para 2026 no es material ni momentáneo. Su petición al gobierno estatal es clara: la asignación de un lote de terreno propio.

Sin embargo, el gobierno de Sinaloa, encabezado por el morenista Rubén Rocha Moya, dio a conocer que su administración no cuenta con una reserva para atender a los desplazados que se encuentran en el predio Montesierra y plantea créditos Conavi (Comisión Nacional de Vivienda) como alternativa. Explicó que enfrenta un panorama complejo en materia de desarrollo urbano.

En ese sentido, el titular de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Urbano Sustentable, Omar López Campos, confirmó que el estado no tiene reservas territoriales para ofrecer una solución inmediata a las familias desplazadas de la sindicatura de Tepuche, municipio de Badiraguato.