Miércoles 26 de noviembre de 2025, p. 30
Los despachos de cobranza lo tienen claro: es momento de dejar atrás prácticas “poco éticas y el hostigamiento” para recuperar los créditos vencidos, pues estos intermediarios enfrentan un momento de alta exigencia con el aumento en los niveles de impago por parte de la población, afirmó Alan Ramírez, presidente de la Asociación de Profesionales de Cobranza y Servicios Jurídicos (Apcob).
En la Confederación Nacional de Cobranza, Ramírez expuso que estos agentes deben dejar erradicar presiones a los deudores, ser responsables y conducirse con respeto.
Los despachos de cobranza son contratados por bancos y sociedades financieras populares, entre otros para contactar a personas con deudas y recuperar los recursos de forma extrajudicial. Ante las autoridades, su principal función es negociar con los deudores para llegar a un acuerdo de pago, restructura o consolidación.
“Nuestro trabajo no solamente recupera saldos, sino restablecer la confianza, la estabilidad y recuperar el futuro”, señaló el presidente de la Apcob.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), las reclamaciones en contra de las gestiones de cobranza son las que más han crecido en el último año: los cuentahabientes presentaron 14 mil 565 quejas, cifra 19.9 por ciento más alta respecto a las 12 mil 146 reclamaciones de igual lapso del año pasado.
“La recuperación de cartera es necesaria, pero sin prácticas poco éticas u hostigamiento. El sector necesita transitar de un modelo de presión a uno de responsabilidad, profesionalización y respeto al usuario”, dijo.
Por ley, los cobradores deben cumplir con reglas como no ofender ni amenazar a los deudores, así como no exhibir públicamente a clientes ni decirse representantes de alguna institución pública.












