Sábado 27 de septiembre de 2025, p. 23
Tras la acusación contra el ex director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) James Comey, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que habrá más personas que enfrentarán cargos: “te guste o no el corrupto James Comey, y no me imagino que a mucha gente le guste, ¡mintió!”, expresó el mandatario a través de su cuenta de Truth Social.
El magnate también sugirió que la acusación formaba parte de una operación de venganza y que espera que se presenten otros cargos contra sus enemigos políticos. “Me lo hicieron a mí durante cuatro años. Me atacaron. Me persiguieron durante cuatro años. Y eso sin contar los cuatro grandes años que tuvimos en la Casa Blanca”, manifestó Trump a periodistas.
Mark Warner, de Virginia, principal demócrata en el comité de inteligencia del Senado, declaró que la acusación es una señal de que el mandatario está cumpliendo su promesa de “convertir nuestro sistema de justicia en un arma para castigar y silenciar a sus críticos”, reportó The Guardian.
Además, agregó que “este tipo de interferencia es un peligroso abuso de poder. Nuestro sistema depende de que los fiscales tomen decisiones basadas en las pruebas y la ley, no en las rencillas personales de un político decidido a ajustar cuentas”.
Estos son “los últimos pasos en los esfuerzos del presidente Trump para transformar la principal agencia de aplicación de la ley del país en un arma centrada en castigar a sus enemigos”, escribieron en carta a Pam Bondi, fiscal general, los demócratas del comité judicial del Senado.
Bondi aseguró que la acusación refleja el “compromiso del Departamento de Justicia con la tarea de responsabilizar a quienes abusan de posiciones de poder para engañar al pueblo estadunidense”.
Por su parte, la ex vicepresidenta demócrata Kamala Harris declaró que la acusación contra el ex jefe de la FBI “es frustrante, pero más que eso, es doloroso verlo”, informó CNN.
El ex republicano, designado para dirigir la FBI en 2013 por Barack Obama y mantenido por Trump hasta que lo despidió en 2017, fue acusado antier por cargos relacionados por presuntamente mentirle al Congreso –hace cinco años– en una audiencia acerca de la investigación de la FBI, por la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones de 2016. Si es declarado culpable, podría enfrentarse a una pena de cinco años en prisión.
Así también, la representación demócrata del Congreso de Estados Unidos hizo públicos una serie de documentos, supuestamente extraídos de la agenda diaria de Jeffrey Epstein entre 2014 y 2019, en la que queda reflejada la intención del empresario de reunirse con los donantes republicanos Elon Musk y Peter Thiel, entre otros.
En su cuenta de X, los demócratas del comité de supervisión de la cámara de representantes mostraron varias imágenes en las que se lee una planificación de los encuentros y actividades previstos por Epstein con Musk, Thiel y Bannon.