Sumarán 61 mil mdd
Es la primera reducción en 12 años // Descartan impacto macroeconómico
Jueves 7 de agosto de 2025, p. 19
El flujo de remesas que ingresa a México caerá 5.8 por ciento este año, lo que supone la primera contracción en los últimos 12 años, anticipó ayer BBVA México.
Aunque esto no tendrá un afecto grave en la economía nacional, el impacto lo resentirán más los hogares de menores ingresos y las entidades federativas cuyo producto interno bruto (PIB) tiene mayor dependencia de estos envíos, anticipó la firma financiera.
Según las estimaciones de BBVA, al país ingresarán alrededor de 61 mil millones de dólares por el concepto de remesas familiares en 2025, una baja de 5.8 por ciento respecto a lo reportado el año previo.
Sería la primera caída anual desde 2013; y en porcentaje, la más profunda desde 2009, año de la crisis financiera mundial que se originó en Estados Unidos.
Las proyecciones fueron divulgadas al presentarse el Anuario de migración y remesas 2025, elaborado por BBVA México y el Consejo Nacional de Población (Conapo).
No es catastrófico
Carlos Serrano, economista jefe de la institución financiera, indicó que esta disminución no tendrá por qué generar un impacto negativo en los indicadores macroeconómicos, toda vez que, al cierre del año pasado, las remesas representaron 3.6 por ciento del PIB nacional.
Estamos estimando que las remesas caerán 5.8 por ciento este año. ¿Es positivo? Desde luego que no, pero tampoco es catastrófico, porque vamos a tener 61 mil millones de dólares; ya hubiéramos querido hace cinco o seis años que se recibieran 61 mil millones de dólares
, dijo el especialista en conferencia.
No obstante, planteó, las familias de menores ingresos y los estados que más dependen de este tipo de envíos serán los que tengan las mayores afectaciones.
No es catastrófico desde una perspectiva macroeconómica; no es que vaya a haber un problema de falta de divisas para el país, pero sí hay que señalar que hay familias, sobre todo en estos estados que tienen mayor dependencia, que pueden tener afectaciones en el consumo
, apuntó.
Según Serrano, en los hogares receptores, estos recursos representan 30 por ciento de sus ingresos, y son ellos los que resentirán los efectos más severos en caso de que disminuyan los flujos.
Los estados del país más dependientes de las remesas son Chiapas, Guerrero, Michoacán, Zacatecas y Oaxaca, donde estos ingresos como proporción del PIB alcanzan 14.6 por ciento, 14, 11.2, 10.9 y 10.3 por ciento, respectivamente.
Trump debilita el mercado laboral
Según el anuario, durante la primera mitad de este año las remesas a Honduras crecieron 25 por ciento, y a Guatemala y El Salvador se incrementaron 18 por ciento, pero en el caso de México cayeron 5.3 por ciento.
Serrano adelantó que mientras las condiciones laborales en Estados Unidos no mejoren, es poco probable que los flujos hacia México vayan al alza.
“A las remesas les va bien cuando el mercado laboral en Estados Unidos está muy bien. Lo que tendría que ocurrir (para que mejore el flujo a México) es que se fortaleciera el mercado laboral. Lamentablemente, el mercado laboral se está debilitando en Estados Unidos por las políticas económicas de Trump.
Todo este tema arancelario está generando incertidumbre, y por lo tanto, menos inversión y menos empleo. Mientras prevalezca esta política económica errática de Trump, será difícil ver aumentos importantes porque no vamos a ver que se fortalezca, pero si eventualmente se corrige el rumbo en esta administración, o en una futura, y volvemos a ver mercados laborales pujantes, ahí es donde vamos a ver recuperación de las remesas
, añadió Serrano.