Viernes 25 de julio de 2025, p. 10
México, Estados Unidos y Canadá, como otras naciones del mundo, deben transitar masivamente hacia las economías regenerativas y resilientes accesibles a la población, ante el incremento de los efectos del calentamiento global y la contaminación, señaló Rodolfo Lacy Tamayo, consejero de sustentabilidad de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Durante la 32 sesión ordinaria del consejo de la Comisión para la Cooperación Ambiental, el especialista resaltó que los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos sólo han cumplido 10 de los 112 objetivos de desarrollo sostenible, 18 están cerca de alcanzarse y 19 por ciento están lejos de lograrse.
Urgió a más esfuerzos para garantizar que ninguno de los miembros se quede rezagado, restaurar la confianza de las instituciones y reducir las presiones sobre el planeta. Apuntó que no se han cumplido las metas del objetivo 14, que fijan para 2025 prevenir y reducir significativamente la contaminación marina, en particular la causada por actividades terrestres.
Sobre este tema, acotó que la Fundación Ellen MacArthur estima que hay más de 150 millones de toneladas de plásticos en los océanos.
Pronosticó que para este año exista una tonelada de plástico por cada tres de peces, y para 2050 haya en peso más de esos materiales que de población marina, lo que representa una amenaza para la salud en la población.
Lacy Tamayo señaló que de lograrse un tratado global sobre plásticos y la regulación de la industria, la meta podría cumplirse; criticó que este sector no tenga una supervisión estricta a nivel mundial, lo que fomenta el gran índice de contaminación.
Destacó que el calentamiento global y los eventos meteorológicos de gran impacto se han incrementado, lo que impulsa migraciones en naciones y comunidades vulnerables y podría ocasionar conflictos sociales.
Sobre los procesos de transición, sugirió contemplar prioridades por sectores, como reducir las vulnerabilidades, aplicar sistemas de alertas tempranas ante fenómenos climáticos, planeación de metas ambientales, creación de entornos para inversión o corredores ecológicos, gestión de la demanda del agua y construcción sostenible de ciudades o trasporte de emisiones cero, entre otros.