Martes 17 de junio de 2025, p. 23
Ginebra. La población de Sudán y de Sudán del Sur, Gaza, Haití y Malí harán frente a un riesgo mortal de hambruna en los próximos meses sin una intervención humanitaria urgente ni una acción coordinada frente a los conflictos, advirtió la ONU ayer, que además anunció una reducción drástica de sus programas de ayuda tras los peores recortes financieros
en consecuencia en gran parte de la decisión de Estados Unidos de reducir al mínimo sus donaciones.
En nuevo informé de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), ambos organismos proyectan un grave deterioro de la inseguridad alimentaria aguda en 13 países y territorios.
La crisis se acentuó ya que a la población le cuesta más acceder a las ayudas, las cuales han sido donantes importantes, como Estados Unidos.
Además de la cinco regiones en la que la situación empeoró gravemente en los últimos meses, el reporte alerta sobre Yemen, República Democrática del Congo, Birmania y Nigeria, que requieren atención urgente para salvar vidas
.
En Gaza, la probabilidad de hambruna aumenta a medida que las operaciones militares israelíes a gran escala dificultan la capacidad de entregar asistencia humanitaria vital
, señaló el informe, en el que se añade que para septiembre los más de 2 millones de gazatíes podrían estar en una situación de catástrofe.
En Sudán, donde la ONU identificó la hambruna en 2024, aunque el gobierno no la reconoció, la situación empeorará a causa del conflicto interno y de los desplazamientos de la población. En mayo, unos 24.6 millones de personas estaban en situación de crisis o peor
. También están en esa misma situación límite cerca de 7.7 millones de personas, que es más de la mitad de la población, en Sudán del Sur.