Martes 10 de junio de 2025, p. 29
Un grupo de al menos 100 taxistas con sus vehículos bloquearon el Eje Central Lázaro Cárdenas, a la altura del Palacio de Bellas Artes, con la finalidad de arribar al Zócalo capitalino y entregar un pliego petitorio para la que las autoridades capitalinas suspendan el programa de fotomultas.
La protesta empezó temprano en las inmediaciones de la glorieta del Metro Insurgentes, justo cerca de la sede de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), donde con pancartas en mano pidieron ser recibidos por las autoridades para que escucharan sus peticiones.
Los trabajadores del volante señalaron que este programa es un abuso y perjudica nuestra labor
, la cual realizan en toda la capital. Algunos pidieron borrón y cuenta nueva
a su multas, por lo que amagaron con volver a manifestarse en caso de no obtener respuesta de la Secretaría de Movilidad.
La dependencia les ofreció instalar una mesa de trabajo este martes a las 14 horas. Tras dejar su pliego petitorio en la SSC, avanzaron hasta el primer cuadro de la ciudad y bloquearon el Eje Central, donde los líderes entregaron otro pliego petitorio al gobierno de la ciudad.
Por otra parte, padres de familia de la secundaria diurna 125 Pablo Casals cerraron por más de dos horas el Viaducto Tlalpan y la calle Arenal, en la alcaldía Tlalpan, para exigir a las autoridades el mejoramiento de las instalaciones debido a que el plantel tiene un grave deterioro.
Los manifestantes comentaron que la situación afecta a 800 alumnos y denunciaron la falta de transparencia en el manejo de recursos que se destinan a la escuela, filtraciones de agua en techo y muros, así como la ausencia de servicios sanitarios. Tras una visita de Protección Civil de la alcaldía, acordaron la intervención por parte de la autoridades educativas locales y federales.
Por último, frente al Centro de Desarrollo Infantil de la calle Riobamba, colonia Lindavista, alcaldía Gustavo A. Madero, hubo otra protesta de padres de familia para denunciar el abuso que sufrió una menor de edad.
Con carteles en los que se leían Los niños no se tocan
y Justicia para Meredith
, exigieron una respuesta de las autoridades. El lugar ya cuenta con sellos de suspensión temporal de actividades.