Una historia de pérdidas, conflictos y la lucha por aferrarse a lo que aún da sentido a la vida es lo que plantea la dramaturga Bárbara Colio en la obra Pequeñas certezas, que dirige Mauricio García Lozano y se escenifica en el Foro Lucerna, en una coproducción del Conservatorio de Danza de México y 25 Producción.

En entrevista con La Jornada, García Lozano expresa que la puesta en escena, escrita hace 20 años, “es una especie de clásico del teatro mexicano contemporáneo, cuyo mensaje es aprender que en la vida no existe una certeza; en todo caso, se pueden tener pequeñas certidumbres, y lo más importante es que debemos adaptarnos a lo que se nos presenta en el día a día. Es como aprender a cocinar con los ingredientes que tenemos para sobrevivir y ser felices.

Con esta versión quise transparentar mucho ese discurso. El montaje es sencillo; está basado en el juego de la convención teatral para profundizar en el mensaje. Hay muchos personajes chistosos y neuróticos, cargados de necesidades; considero que son una bola de huerfanitos con la necesidad de pertenecer a alguna familia y tener alguna certeza; obviamente, nadie lo consigue, pero logran aprender a soltar y a adaptarse. Por ahí va mi lectura en esta versión.

Pequeñas certezas narra la historia de Mario, quien ha desaparecido. Natalia emprende un viaje a la ciudad natal de aquél, Tijuana, a encontrarse con sus hermanos y con la noticia de un fraude. El enfrentamiento entre las familias del centro y norte estalla. Seres desamparados ante la verdad de que sólo sobrevivirán si pueden asirse a las pequeñas convicciones cotidianas que la vida les da. Es un relato que se desenvuelve con suspenso y giros inesperados, y que a la vez ofrece momentos conmovedores.

“Es una historia bastante trágica porque parte de una desaparición inesperada; hay un personaje que acaba de ausentarse y no sale en el montaje; ese acontecimiento transforma la vida de quienes sí aparecen en la obra, como su novia, que vive en la Ciudad de México, y esto se vuelve una especie de thriller, porque deja pendiente una herencia extraña y terminan por juntarse dos familias disfuncionales; entonces, la situación se vuelve muy cómica y delirante”, comenta el director.

En esta comedia negra, los personajes muestran sus vicios, sus fallas y su ternura. Descubren que siempre existe la posibilidad de movernos y trascender nuestros miedos e incapacidades de relación. Es una puesta sobre la familia y los arquetipos de relaciones familiares que existen, positivos y negativos.

La propuesta escénica es una invitación a reflexionar sobre las pequeñas cosas que nos mantienen a flote en medio de la tormenta.

Colio explora en su obra las paradojas de la vida cotidiana y las formas en que las personas buscan respuestas ante la incertidumbre.

El elenco de Pequeñas certezas está conformado por Mahalat Sánchez, Assira Abbate, Rodrigo Virago, Samantha Coronel y Epy Vélez, quienes dan vida a los complejos y matizados personajes creados por la autora, y que transitan entre la tragedia y la comicidad, atrapados en un conflicto familiar que mantiene al público al borde del asiento.

En la dirección, García Lozano demuestra su destreza para abordar temas complejos con una mirada única y un ritmo impecable; además, trabajó en el desarrollo de una atmósfera cargada de tensión y emoción que permite a los actores explorar a fondo la sicología de sus personajes y la complejidad de las relaciones familiares.

El montaje, que se realiza con el estímulo fiscal Efiartes, se escenifica los viernes a las 20:30 horas, el sábado a las 19 y los domingos a las 18 horas en el Foro Lucerna (Lucerna 64, colonia Juárez).

La temporada concluye el 29 de diciembre.