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Los de abajo

Celebran amparo a favor de Ostula

L

uego de 57 años de lucha por el reconocimiento de sus tierras, la comunidad nahua de Santa María Ostula, en el litoral del Pacífico michoacano, celebró la histórica sentencia que dejó insubsistente la resolución presidencial que en 1967 dotó de tierras ejidales al poblado La Placita, Aquila.

La sentencia, declaran desde Ostula, no es sólo importante para su comunidad, sino para el resto de los pueblos indígenas de México, pues durante más de 100 años una de las políticas coloniales más usadas por los gobiernos para despojar de sus territorios a las comunidades fue la ilegal creación e imposición de ejidos en sus antiguos territorios comunales, lo que provocó su pulverización y destrucción.

La sentencia, dictada el pasado 15 de noviembre por el Tercer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y de Trabajo del Décimo Primer Circuito, pone en cuestión este largo proceso de despojo y marca un parteaguas en la inercia colonial y racista que ha mantenido hasta el día de hoy a nuestros pueblos con derechos de segunda y sumidos en la pobreza, advirtió la representación comunal de Ostula a la prensa.

Tras la resolución del amparo a su favor, la comunidad exigió a la presidenta Claudia Sheinbaum y al gobierno de Michoacán que no revoquen o modifiquen la sentencia como ocurre en tantos casos, y que al reponerse el trámite de dotación de tierras de La Placita le sean reconocidas y respetadas las tierras localizadas en los parajes de Xayakalan, la Canahuancera y las tres Majahuas, las cuales, precisó, corresponden a la posesión inmemorial de nuestra comunidad y que hasta antes de este amparo habían sido dotadas al ejido de La Placita.

La lucha ha sido muy larga y llegará su fin cuando las autoridades resarzan el daño y consoliden la paz que tanto merece esta región codiciada por empresas mineras, inmobiliarias, crimen organizado y demás intereses ajenos. Aunado al despojo, en las últimas dos décadas la comunidad ha sido víctima de la violencia: 42 asesinatos de comuneros y la desaparición de cinco personas es el saldo. La justicia para todos ellos tiene que llegar.

Desinformemonos.org