Marko Cortés Mendoza concluirá su gestión al frente del PAN como el dirigente de esa fuerza política con mayor cantidad de estados electoralmente perdidos. Asumió las riendas del blanquiazul en 2018, cuando este partido alcanzó su cifra récord de gobiernos estatales (11), lo cual no había logrado durante los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, de 2000 a 2012.

Luego de las elecciones internas programadas para el próximo domingo, con las que se elegirá la nueva dirigencia, entregará el partido con gobiernos únicamente en Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes y Chihuahua, además de la derrota en la contienda presidencial.

Tras los comicios de junio pasado, la fuerza del PAN se concentra en la esfera municipal. En 2018 tenía 373 alcaldías prácticamente todas ganadas por cuenta propia; cerrará el año con 426, pero la mayoría en coalición.

Mientras en 2018 el partido contaba con al menos una alcaldía en cada una de las 32 entidades, en 2021 ya no tenía representación municipal en tres estados. En 2024 son cinco las entidades sin alguna demarcación bajo sus siglas, y en seis entidades gobierna entre uno y tres municipios. Sin embargo, de manera constante la dirigencia partidaria hace alusión a que solo o en coalición, Acción Nacional ganó en las pasadas elecciones 14 ciudades capitales del país.

Sus resultados han sido incluso tema de acusaciones e intento de deslinde de Jorge Romero y Adriana Dávila, aspirantes a la presidencia del partido.