En el área hay otro antro que opera hasta altas horas
Sábado 2 de noviembre de 2024, p. 25
La alcaldía Iztapalapa será persistente en la denuncia penal por corrupción de menores contra los responsables del establecimiento Terraza Dos Pisos Bar, en el que al menos 16 menores resultaron intoxicados, al parecer por la ingesta de alcohol adulterado, en una celebración de halloween la tarde del jueves.
Funcionarios de la demarcación explicaron que es difícil que proceda la denuncia penal por quebrantamiento de sellos, al no haber flagrancia del hecho, pero de confirmarse que las bebidas alcohólicas estaban adulteradas se les procesará por delitos contra la salud, considerados graves, porque la ingesta de ese tipo de bebidas puede ocasionar daños serios como afecciones hepáticas e incluso ceguera.
En el Bazar Ermita, que ocupa un predio entre Ermita Iztapalapa y la calle Paraíso, colonia Xalpa, frente a la Utopía Atzintli Hídrica, los establecimientos del primer nivel funcionaron ayer con normalidad, aunque locatarios y expositores evitaron hablar de lo ocurrido, así como del funcionamiento de dicho negocio al asegurar que cierran temprano y no se percataron de lo ocurrido ni de la forma en la que opera el bar.
Con tres tipos de sellos
Junto al local, que ayer tenía sellos de resguardo de la Fiscalía General de Justicia, de clausura por la alcaldía Iztapalapa y de suspensión de actividades por riesgo de la Agencia de Protección Sanitaria de la Secretaría de Salud capitalina, funciona también en el segundo nivel un restaurante con venta de alcohol denominado Hamburguesa Social Club, que ayer estuvo cerrado.
En el bazar hay ocho negocios entre tiendas de calzado, venta y reparación de instrumentos musicales y de equipos celulares, comida japonesa, óptica y tatuajes, además de expositores en carpas que por la tarde los levantaron.
De acuerdo con comerciantes de la zona, junto al Bazar Ermita opera otro establecimiento como bar que se mantiene abierto hasta la madrugada, denominado Caronte Terraza, en el segundo nivel, sobre una cocina económica y una carnicería, aunque en el exterior no exhibe letrero.
La puerta metálica del segundo nivel permanecía cerrada pasadas las 17 horas y no se escuchaba movimiento, algunas ventanas permanecieron abiertas en las que sólo se veían los respaldos de las sillas.