La estructura de la FIFA ha contribuido a una amplia gama de daños sociales, sobre todo abusos muy graves y sistemáticos de los derechos humanos, concluyó un informe del grupo activista FairSquare.

El organismo de derechos humanos pide una profunda reforma del regulador mundial, pero afirma que esto es casi imposible desde dentro. Se argumenta que algunos aspectos de la gobernanza han empeo-rado desde que Gianni Infantino fue elegido presidente en 2016 después de una serie de escándalos de corrupción.

El informe de 140 páginas, titulado Sustituto: el caso de la reforma externa de la FIFA, se basó en más de 100 entrevistas, así como en investigaciones de campo, para evaluar el impacto de las Copas del Mundo desde Sudáfrica 2010. La conclusión fue que el organismo internacional contribuye al daño y sufrimiento de los países donde se ha llevado a cabo este torneo.

FairSquare, enfocado en la defensa de los derechos humanos, señaló la incapacidad de la FIFA para autorregularse, al tiempo que enfrenta conflictos de intereses por ser regulador y organizador de las competencias.

Las operaciones del ente mundial conllevan riesgos muy graves para una amplia gama de derechos humanos y es culpable de graves fallos de diligencia debida, sobre todo en el periodo anterior a Qatar 2022, donde en repetidas ocasiones no tomó medidas para mitigar el abuso contra trabajadores migrantes involucrados en los preparativos del torneo, señala el documento.

Sus operaciones en otros lugares han estado relacionadas con abusos, incluidos desalojos masivos, la destrucción de medios de subsistencia, ejecuciones extrajudiciales y otras violaciones del derecho a la vida, trabajos forzados y abusos físicos, sexuales y sicológicos, agregó.

El programa FIFA Forward, que distribuye los fondos del organismo entre las asociaciones miembro, también genera un conflicto, pues sirve para obtener votos de los presidentes titulares. Un sistema donde también hay falta de transparencia.

La conclusión llega durante un periodo tenso para la FIFA, donde su autoridad ha sido impugnada, así como las severas críticas por su relación con el reino de Arabia Saudita, el cual fue elegido como sede para el Mundial 2034.

© The Independent

Traducción: Erendira Palma Hernández