Londres. Los jefes de las agencias de inteligencia estadunidense y británica elogiaron ayer la audaz incursión ucrania en Rusia y pidieron un alto el fuego en Gaza. En una aparición conjunta sin precedente, que tuvo lugar en un evento público en Londres, William Burns, director de la agencia de inteligencia de Estados Unidos (CIA), y Richard Moore, cabeza de la oficina de inteligencia de Reino Unido (MI6), indicaron que la sorpresiva incursión ucrania en Rusia es un importante logro que podría cambiar la narrativa de este conflicto, que ya ha durado dos años y medio, e hicieron un llamado a un cese el fuego en la guerra de Israel contra Hamas desatado en la franja de Gaza.

Moore dijo que la ofensiva sorpresa lanzada por Ucrania en agosto para capturar territorio en la región rusa de Kursk fue típicamente audaz y atrevida por parte de los ucranios, para tratar de cambiar el juego. Destacó que la operación –que según Kiev ha logrado la captura de unos mil 300 kilómetros cuadrados– ha llevado la guerra a los hogares de los rusos comunes.

Junto con Moore en el festival FT Weekend, en la casa Kenwood, Burns afirmó que la ofensiva fue un importante logro táctico que expuso las vulnerabilidades del ejército ruso.

Todavía está por verse si Ucrania puede convertir los triunfos en una ventaja a largo plazo. Hasta ahora, la ofensiva no ha hecho que el presidente ruso, Vladimir Putin, desvíe su atención del este del país invadido, donde sus fuerzas se acercan a la ciudad de Pokrovsk, que tiene una ubicación estratégica.

El presidente ucranio Volodymir Zelensky presiona a sus aliados para que le permitan el uso de misiles suministrados por Occidente para atacar sitios desde los que Moscú lanza las ofensivas aéreas, los cuales se encuentran en el territorio ruso.

El presidente estadunidense, Joe Biden, ha permitido que Ucrania dispare misiles proporcionados por Estados Unidos hacia territorio ruso en acciones de autodefensa, pero a una distancia limitada a objetivos transfronterizos considerados como una amenaza directa, debido a la preocupación de una mayor escalada del conflicto.

Burns destacó que Occidente debe estar consciente de tal riesgo, pero no sentirse innecesariamente intimidado por la belicosidad rusa; reveló que hubo un momento a finales de 2022 cuando se produjo un riesgo genuino de uso de armas nucleares tácticas por parte de Moscú.

Perturbadora alianza

También advirtió de la creciente y perturbadora relación de defensa entre Rusia, China, Irán y Corea del Norte que, dijo, amenaza a Ucrania y a sus aliados occidentales en Medio Oriente. Corea del Norte ha enviado municiones y misiles a Rusia para que las use contra Ucrania, mientras Irán la abastece con drones.

Confirmó que la CIA no ha visto pruebas de que China envíe armas a Rusia, pero vemos muchas cosas casi equivalentes. Asimismo, advirtió a Irán que no suministre misiles balísticos a Moscú, diciendo que sería una notable escalada de la relación.

Antes de su presentación, los dos jefes de espionaje escribieron un artículo de opinión para el diario británico Financial Times, en el que hacen un llamado a un cese el fuego en la guerra de Israel contra Hamas, y sostienen que sus agencias habían explotado nuestros canales de inteligencia para presionar intensamente en favor de la contención y la desescalada.

Burns ha estado muy involucrado en los esfuerzos para lograr el fin del conflicto, en agosto viajó a Egipto para participar en conversaciones de alto nivel para forjar un acuerdo sobre los rehenes y, al menos, una tregua temporal.

Por el momento no se ha llegado a ningún acuerdo, aunque los funcionarios estadunidenses insisten en que su consecución está cerca. No puedo decirles qué tan cerca estamos ahora mismo, dijo Burns y afirmó que los negociadores trabajan en propuestas nuevas y detalladas para los próximos días.

El jefe de la CIA aseguró que 90 por ciento del texto ha sido aprobado por las partes en conflicto, pero el 10 por ciento restante es el último 10 por ciento por una razón, debido a que es la parte más difícil, y añadió que para poner fin al conflicto se requieren algunas decisiones difíciles y algunas concesiones complicadas por parte de Israel y Hamas.