El propietario de la red social X, Elon Musk, presentó ayer una cuenta creada por su organización para acusar al juez brasileño Alexandre de Moraes de violar la Constitución de ese país al ordenar la suspensión de las operaciones de la plataforma, acusada de fomentar la desinformación y negarse a designar a un administrador, como exige la ley nacional.

Además, la empresa proveedora de Internet Starlink, también propiedad del multimillonario, anunció que no acatará la decisión de la justicia brasileña de bloquear el acceso a X en Brasil.

En tanto, se espera que este lunes una sala de cinco miembros del Supremo Tribunal Federal de Brasil vote si confirma la decisión de cerrar la plataforma en el país.

La cuenta @alexandrefiles, verificada y acompañada del logotipo que distingue las cuentas propias de X, publicó una imagen de una supuesta orden del Tribunal Supremo de Brasil que exige al administrador el bloqueo de siete cuentas y suspender la monetización que facilita X a los usuarios que paguen una cuota mensual.

Hoy comenzamos a arrojar luz sobre los abusos de la ley brasileña cometidos por Alexandre de Moraes, señala la cuenta en su mensaje de presentación. Nos hemos visto obligados a compartir estas órdenes porque no hay transparencia por parte del tribunal y las personas que están siendo censuradas no tienen ningún recurso para apelar, añade.

La página acompaña el documento con extractos de los artículos 5 y 220 de la Constitución federal, en los cuales se defiende la libertad de expresión y de pensamiento, independiente de toda censura.

Por su parte, en declaraciones a la televisora Globo, el presidente de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), Carlos Baigorri, aseguró que Starlink avisó que no cumplirá la orden hasta que las cuentas de la empresa, también bloqueadas por orden de la Corte Suprema de Brasil, sean desbloqueadas por la justicia.

En cuanto recibimos esa información, la enviamos al ministro Alexandre de Moraes para que tome las medidas que considere oportunas, concluyó Baigorri.

Moraes, a quien Elon Musk ha tachado de dictador, convocó a una sesión virtual de la primera sala del tribunal –de la que es miembro– para que sus pares puedan revisar su decisión.

El máximo tribunal brasileño tiene 11 jueces repartidos en dos salas de cinco miembros cada una, sin incluir al presidente. Pueden votar para mantener o ratificar las decisiones de un solo juez.

X dejó de funcionar en Brasil, uno de sus mayores mercados, en la madrugada del sábado por decisión de Moraes, quien mantiene desde hace meses una disputa con Musk.