Martes 16 de abril de 2024, p. 18
Washington. Por primera vez en el siglo, en la mitad de los 75 países más pobres del mundo aumenta la diferencia de ingresos con las economías más ricas, lo que significa un retroceso histórico del desarrollo, afirma el más reciente informe del Banco Mundial (BM).
La diferencia entre el crecimiento de la renta per cápita de las naciones más pobres y las más ricas ha crecido en los últimos cinco años, según el informe. Por primera vez, vemos que no hay convergencia. Cada vez son más pobres
, declaró a Reuters Ayhan Kose, jefe adjunto del BM y uno de los autores del reporte. Hay una regresión estructural muy grave, un retroceso en el mundo (...) por eso estamos dando la voz de alarma
, añadió.
Los 75 países que pueden optar a subvenciones y préstamos sin intereses de la Asociación Internacional de Fomento (AIF) del BM corren el riesgo de perder una década de desarrollo si no se producen cambios políticos ambiciosos y una ayuda internacional significativa.
Kose señala que el crecimiento en muchas economías de la AIF ya había empezado a disminuir antes de la pandemia, pero en 2020-2024 será de sólo 3.4 por ciento, que es el crecimiento más débil desde principios de los años 90. La invasión rusa a Ucrania, el cambio climático, el aumento de la violencia y los conflictos internos también pesaron sobre sus perspectivas.
Más de la mitad de los países de la AIF están en África subsahariana, 14 en Asia oriental y ocho en América Latina y el Caribe. Treinta y uno tienen una renta per cápita inferior a mil 315 dólares anuales, como República Democrática del Congo, Afganistán y Haití.
Uno de cada tres países de la AIF –donde vive 92 por ciento de la población mundial– es más pobre ahora que en vísperas de la pandemia, y carece de acceso a una cantidad suficiente de alimentos asequibles y nutritivos. La mitad de los gobiernos no pueden hacer frente al servicio de la deuda o corren un alto riesgo de no poder hacerlo.