Opinión
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El Correo Ilustrado

Deber de los medios, propagar la educación

U

no de los principales problemas que ha tenido México a lo largo de su historia, sin duda, ha sido el tema educativo. Los escollos que arrastraba nuestro país en analfabetismo a principios del siglo XX no son algo menor; incluso en ese entonces no se había homogeneizado el idioma español como lengua corriente en el país.

Gracias a los esfuerzos por procurar la formación académica de los mexicanos, tal como lo dicta el artículo tercero de la Constitución de 1917, se implementó como derecho y obligación la educación básica para los niños.

Debido al problema de la frágil comunicación interna en el país, era complicado hacer valer o, al menos, alzar la voz contra los decretos gubernamentales, por lo cual la publicación en el Diario Oficial de la Federación de la Ley Federal de Educación, por el presidente Ávila Camacho, el 23 de enero de 1937, hace ver que es necesario promulgar la educación a través de los medios masivos.

Luis Enrique Aparicio López

El Prian tiene aversión al cambio y desprecio por la verdad, opina

El Prian y sus seguidores están perdidamente enamorados de una realidad alterna, de una dimensión indivisible, de una pesadilla reconfortante, de un pasado político de terror adornado con una corona de hipocresía y un cetro de autocomplacencia.

Por más de cinco años el Prian y sus voceros han lanzado, a diario, dardos de desinformación y odio, pues su imaginación se ha gastado a tal punto de pensar que, tras tantas derrotas y contradicciones y de ser exhibidos, lo único que les queda es el autoengaño y el escape al mundo de su mediocre fantasía.

Para ellos todo está mal, a pesar de la reducción de la inseguridad y de la pobreza extrema, del fortalecimiento del peso, la inversión extranjera histórica. De ese primer lugar en áreas naturales protegidas y la reforestación de más de un millón de hectáreas, además del máximo récord en creación de empleos, el crecimiento del salario, las grandes obras de infraestructura, como trenes, presas, aeropuertos, carreteras, hospitales, y cientos de enormes logros.

El Prian, desde su triste y miserable discurso de hostilidad y ficción, no sólo vocifera su aversión por la transformación. Supura el desprecio por la verdad.

Carlos Fernando Cárdenas Amaro

Propone caravanas seguras en carretera

A finales de diciembre, al regresar de una visita a la ciudad de Orizaba, en las Cumbres de Maltrata fuimos despojados de nuestro vehículo por hombres encapuchados quienes, también, metralleta en mano habían secuestrado un camión de carga que nos antecedía. Sucedió cuando empezaba a oscurecer, en medio de la niebla y con la presencia de patrullas policiacas estacionadas, de trecho en trecho, en la carretera.

El chofer camionero que nos auxilió en la cumbre refirió haber sufrido ya un asalto en dicho tramo carretero, caracterizado, según su relato, por los atracos que cada día padecen los transportistas ante la impotencia de los cuerpos policiacos apostados en la zona.

La denuncia de la agresión y robo que sufrimos fue interpuesta en su momento sin resultado alguno.

Mientras esta grave situación de asaltos a transportes de carga no sea remediada por la autoridad, es deseable que los cuerpos policiacos organicen caravanas seguras para los automovilistas y sus familias que transitan este tramo de la carretera, entre la caseta de Esperanza y Orizaba, a fin de salvaguardar su integridad personal y pertenencias.

Isaías Espinosa

Invitación

Proyección del documental La fábrica del odio

Invitamos a la exhibición del documental La fábrica del odio, en el cual se explica la guerra mediática y sicológica que lleva a cabo el gobierno de Estados Unidos contra Cuba. La cita es el 27 de enero a las 17:30 horas, en nuestro local ubicado en Madero 71, interior 4 (primer piso), a media cuadra del Zócalo de la Ciudad de México.

Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, Ana Rodrigo, Líbano Bretón, Aline Pérez, Irene Gatica y Tamara Barra