Viernes 21 de abril de 2023, p. 7
La sala especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que no hubo actos anticipados de campaña en distintos eventos en los que participaron aspirantes a la candidatura presidencial de Morena.
Por mayoría de votos de los magistrados Luis Espíndola y Gabriela Villafuerte, y la postura en contra del magistrado presidente, Rubén Lara, se resolvió que el canciller Marcelo Ebrard no incurrió en actos anticipados de precampaña y campaña durante el acto del pasado 3 de diciembre titulado ¿Qué sigue para México?, donde tomó protesta a comités para que le ayuden a ganar la encuesta de Morena que definirá a su abanderado presidencial.
También se revisaron, por orden de la sala superior, otros actos (llevados a cabo en Toluca, Oaxaca, Coahuila y Tabasco, entre otros) donde participaron, por separado, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum; el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y el senador Ricardo Monreal, todos, aspirantes a la candidatura de Morena. Con distintos matices, se dijo que si bien se impugnaron actos partidistas que incluso podrían llegar a ser proselitistas, no se confirma el acto reclamado.
En principio, porque son eventos futuros de realización incierta y porque el proceso electoral federal 2023-2024 empieza hasta septiembre, mientras los sucesos denunciados ocurrieron en 2022.
En posición disidente a los proyectos, Lara citó jurisprudencias de la sala superior en el sentido de que puede haber actos anticipados de campaña incluso antes de las precampañas; igualmente, mencionó la necesidad de tomar en cuenta la existencia de conductas reiteradas o planificadas. Igualmente, aludió a la orden de tomar en cuenta para este análisis la proximidad, sistematicidad, impacto territorial, contenido de mensajes y otros elementos para determinar el impacto o trascendencia de la conducta.
Al contrario, Espíndola y Villafuerte dijeron que los actos pueden ser considerados como partidistas, incluso con matices electorales, pero ello no alcanza a acreditar el ilícito.
Espíndola destacó que hay eventos con expresiones espontáneas, de júbilo, con llamados a la unidad, propios de los partidos, mismos que de manera permanente buscan hacerse de simpatizantes. Además, subrayó, se inscriben en el ejercicio de la libertad de asociación política, expresión y de reunión, así como de la autorganización y autogobierno de los partidos.
Recordó que no sólo Morena ha tenido reuniones de ese tipo, sino también el PRI y el PAN, donde algunos personajes han señalado abiertamente quiero ser presidente
, y tampoco fue considerado ilegal.
Villafuerte hizo énfasis en que para mandar callar a alguien
hay que tener bases.