Lunes 3 de octubre de 2022, p. 22
Los problemas energéticos de Europa están sobrevalorados en los mercados financieros, debido a que la economía europea experimentará un estancamiento pronunciado, pero no una recesión profunda en los próximos trimestres, prevé Norbert Rücker, jefe de Economía e Investigación de Next Generation para el banco privado Julius Baer.
El sabotaje en Nord Stream, un gasoducto de gas natural construido en alta mar desde Víborg en Rusia hasta Greifswald en Alemania, ahora pone el foco en los gasoductos noruegos y su vulnerabilidad, y tal vez desde una lectura optimista, agudiza la seguridad a su alrededor.
Así, los precios de la energía tienden a la baja, probablemente con algunos picos a corto plazo, debido a breves sacudidas de riesgo.
“Las repercusiones clave son menores, porque los gasoductos no han entregado gas natural últimamente y porque Europa puede arreglárselas sin los suministros rusos no solo hoy, incluso a largo plazo. El shock energético disparó amortiguadores a nivel mundial, sin embargo, continuamos viendo que los precios de la energía tienden a la baja, creemos que los riesgos energéticos de Europa están sobrevaluados en los mercados y estimamos que la economía europea estará estancada, no en recesión”, aseveró Norbert Rücker.
Si bien la situación sigue siendo incierta y quedan muchas preguntas abiertas, las pruebas más recientes apuntan a explosiones que provocaron fugas en tres puntos diferentes de ambos gasoductos y convirtieron el mar Báltico temporalmente en un dañino baño de burbujas.
El mercado del gas natural se ha mantenido tranquilo con precios al alza pero no en exceso. Nord Stream no ha entregado gas natural a Europa últimamente y sólo volúmenes menores desde el verano. Gracias a las importaciones sustanciales de gas natural licuado y principalmente a los recortes de la demanda industrial, Europa compensa completamente las reducciones de Rusia e incluso ha aumentado el almacenamiento por encima de los niveles normales.