Miércoles 20 de julio de 2022, p. 18
Reino Unido inició una consulta sobre una reforma al mercado eléctrico, que tiene dos propósitos fundamentales, el primero garantizar su seguridad energética y el segundo reducir costos para los consumidores.
Las propuestas para la consulta inicial incluyen la exploración de cambios en el mercado mayorista de electricidad, que actualmente dependen de los precios volátiles del gas para fijar las tarifas, a fin de introducir energías renovables mucho más baratas.
Las modificaciones prevén ayudas del gobierno para las personas con facturas de energía más altas.
La exposición del Reino Unido a los volátiles mercados globales de gas y los costos de energía para los consumidores podrían reducirse radicalmente a largo plazo gracias a una revisión transformadora del diseño del mercado de electricidad de Gran Bretaña
, señala la propuesta del gobierno del Reino Unido presentada el pasado lunes.
La Revisión de los Acuerdos del Mercado de la Electricidad (REMA) buscará puntos de vista sobre una amplia gama de opciones para abordar los desafíos combinados de responder a los costos energéticos globales más altos, la necesidad de impulsar aún más la seguridad energética y llevar al Reino Unido a un sistema energético más limpio, se explica.
Bajo el sistema actual, los precios del gas suelen fijar los costos de la electricidad al mayoreo, porque a menudo es la última fuente de suministro para satisfacer la demanda.
La participación cada vez mayor de las energías renovables en el sistema significa que, con el tiempo, la electricidad más barata producida por energías renovables determinará el precio con más frecuencia, plantea la iniciativa.
La consulta se presenta en momentos en que los precios de los energéticos se han disparado en Europa. En 2021, antes de la invasión de Rusia en Ucrania, los precios del gas subieron alrededor de 600 por ciento.
Actualmente, la inflación en la zona euro se encuentra en niveles récord, en junio el índice inflacionario llegó a 8.6 por ciento anual, impulsado por los fuertes aumentos en los precios de la energía y los alimentos.
El lanzamiento de la consulta forma parte de la revisión integral del mercado eléctrico del gobierno, anunciada por primera vez en la Estrategia de Seguridad Energética Británica (BESS).
El BESS elevó significativamente las ambiciones de desarrollar tecnologías bajas en carbono y más económicas, como la energía eólica marina, la solar y la nuclear, como parte de los planes del Reino Unido para ofrecer un sistema eléctrico limpio y seguro para 2035.