Lo que nos dejó la Revolución
Cumbre de Biden y el mandarín Xi: en búsqueda de la estabilidad estratégica
perdida
Hoy, en las elecciones de Venezuela y Chile: proyecto popular vs. proyecto imperialista de EU
Las nuevas generaciones en Shanghai que prefieren emigrar a la tranquila vida campirana
Simple basura
De valor
El otro Tom
Zacatecas, sana afición, no sólo cacicazgos//De Michín a Chamaco
Cristóbal Reyes, leyenda del baile flamenco
n el contexto de las conmemoraciones por el aniversario de la Revolución Mexicana, el presidente Andrés Manuel López Obrador pronunció un extenso discurso en el cual dio cuenta de su visión de la historia nacional y resaltó el papel del pueblo en las grandes gestas que forjaron el México actual. El mandatario articuló su alocución a partir de los tres procesos transformadores de nuestro pasado: la Independencia, la Reforma y la propia Revolución, haciendo hincapié de que sólo este último, con todas sus imperfecciones, logró integrar las necesidades y los reclamos de las mayorías a la estructura jurídico-institucional del país.
Las agitadas aguas del CIDE
l nado sincronizado
es la estrategia opositora más acabada. Hoy sus brazadas agitan las aguas del CIDE y conviene recordar qué y para qué es esa institución académica. Por supuesto que la historia recoge importantes gestiones personales en su nacimiento, pero su condición de posibilidad provino del Estado de la década de los 70. Producir cuadros de calidad para el desarrollo nacional y para las políticas públicas fue su objetivo y lo cumplió. En la debacle política del final del ciclo histórico del Estado desarrollista, el CIDE perdió importancia y un gestor priísta se hizo cargo de la institución, debilitándola al grado de dejarla como objetivo a modo de una nueva dirección ligada al zedillismo y al nuevo proyecto intelectual del neoliberalismo.
ería lógico pensar que la fabricación mundial de automotores eléctricos, por sí sola va a traducirse en una disminución inmediata de la contaminación ambiental y del calentamiento de la Tierra, pero no es así. Con el uso más amplio y programado de otros medios energéticos, por ejemplo, el uranio, darán pasos para el mejoramiento de la atmósfera y el estilo de vida.
ace un siglo que se estudia el fenómeno migratorio y siempre surgen nuevas y sorpresivas modalidades. Es el caso de Haití, una migración generada por fenómenos naturales, crisis ambientales, económicas, políticas y sociales. Si bien en ese país hay una larga tradición migratoria, especialmente hacia Estados Unidos, República Dominicana, Canadá, Francia y otras naciones; el terrible terremoto de 2010, que dejó miles de muertos, devastó la pobre infraestructura existente y arrasó con miles de viviendas, fue el detonador para originar un intenso flujo migratorio con un destino diferente, hacia Brasil, Chile y Argentina.
l miércoles 17de noviembre la Escuela Nacional de Estudios Superiores de la UNAM-León organizó, como lo ha hecho desde hace varios años, un debate muy fructífero para repensar los retos a los que se enfrenta el mundo. Centrales sin duda en este esfuerzo, lo son repensar el desarrollo y lanzar la imaginación para la construcción de una globalización socialmente responsable, como la llamaron los organizadores de este Congreso Multilateral
. En ésta y la siguiente entrega comparto con los lectores de La Jornada unas de mis notas sobre los temas tratados en nuestra discusión.
o nos llamemos a engaño. España se ubica geográficamente en Europa, eso sí en su periferia. Durante la tiranía de Francisco Franco la península ibérica se definía como una excentricidad en medio de un continente cuyo pasado cultural y político se enraizaba en el nacimiento de la civilización judeocristiana. De forma caricaturesca, la expresión popular: África comienza en los pirineos, retrataba a España como un país de reyezuelos, dictadores y caciques. Para los gachupines era sangrante y doliente. España había sido un imperio no una colonia. Este trato de sus vecinos del norte era hiriente. Su respuesta fue un comportamiento altanero, propio de una personalidad atormentada que no logra estar en paz con su historia. Se enrocó en un discurso ampuloso donde reivindicó su grandeza. Desde don Pelayo, con quien se inicia la reconquista, pasando por los reyes católicos, forjadores del Estado moderno, siguiendo con la saga de los Habsburgo, hasta llegar a los Borbones, se construyó un mito: España una, España grande, España libre. La leyenda rosa apaciguó los espíritus torturados por el genocidio y el etnocidio ininterrumpido durante los tres siglos de control colonial. Fernando VII torturó, descuartizó, empalizó y siguió esclavizando a los pueblos originarios. No era el siglo XVI, era el siglo XIX.
n estos tiempos pandémicos en el que las actividades avanzan con cautela hacia la normalidad, entre otras, con restricciones en horarios y en el número de visitantes, está el Museo de la Revolución te recibe en la plaza. Es el título de la exposición que montó su creativa directora, Alejandra Utrilla, en la explanada del Monumento a la Revolución para conmemorar el 111 aniversario del inicio de la Revolución Mexicana y su 34 aniversario como recinto museístico, a cargo de la Secretaría de Cultura capitalina.
i a alguien debemos el rescate de la mayoría de los archivos de nuestra nación, es al historiador Carlos Martínez Assad, quien fue director del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y ha formado a muchos futuros investigadores.
A
sí es la vida
, me dijiste estoico y sereno cuando me viste derrotado por la partida de nuestro amado Chugo. Me diste un beso enorme y uno de tus abrazos que reconfortaban al corazón. Yo no te escribo bajo la mirada de tus múltiples formas: maestro, periodista, etcétera. Te escribo bajo el papel nuclear que jugaste conmigo: mi bisabuelo, mi Tata.