10 de junio no se olvida
Protesta, pintas y huevazos frente a la casa del ex presidente
Viernes 11 de junio de 2021, p. 2
A 50 años del halconazo, miles volvieron a tomar las calles. El grito ahora fue de exigencia, de rabia por cinco décadas de impunidad. 10 de junio. 1971-2021. Crimen de Estado ¡Ni perdón ni olvido!
, fue la consigna.
Miles de personas marcharon ayer para conmemorar medio siglo de la llamada masacre del Jueves de Corpus, del 10 de junio de 1971, cuando un grupo paramilitar denominado halcones arremetió contra estudiantes que participaban en una movilización que iría del Casco de Santo Tomás al Zócalo. La de ayer siguió la misma ruta.
El contingente fue encabezado por integrantes del Comité 68, a quienes se sumaron miembros de organizaciones sociales y populares. Salieron para exigir una vez más que los responsables de ese delito sean castigados, incluyendo al ex presidente Luis Echeverría Álvarez.
La jornada se inició alrededor de las 11 de la mañana, cuando sobrevivientes del halconazo acudieron a la casa de Echeverría para demandar que se le sancione por aquella masacre y le dejaron varios mensajes en la puerta, las fachadas y hasta en las calles cercanas a su domicilio.
Entre carteles y pintas se leía: ¡Juicio a Echeverría!
¡Ni perdón ni olvido!
¡Aunque te alcance la muerte, nunca descanses en paz!
¡50 años de impunidad!
En uno aparecía la foto del ex mandatario acompañada de la leyenda: ¡Genocida cerca. No olvide su rostro, no olvide su nombre
.
Como parte de la manifestación, los sobrevivientes a aquellos hechos, acompañados por el colectivo HIJOS –conformado por hijos de personas desparecidas durante la guerra sucia iniciada por Echeverría– lanzaron huevos hacia el interior de la casa, ubicada en la colonia San Jerónimo Lídice, al sur de la Ciudad de México.
Nadie dentro acusó de recibido y sólo un hombre, que dijo ser vecino de la zona, apareció para reclamar por las pintas.
De Santo Tomás al Zócalo
Por la tarde, alrededor de las cuatro, miles de personas marcharon en la misma ruta que pretendía tomar aquella movilización de hace 50 años. Los contingentes salieron del Metro Normal y comenzaron la caminata sobre la calzada México-Tacuba con rumbo al Zócalo, en medio de las tradicionales consignas de la fecha, como 10 de junio no se olvida, es de lucha combativa
y Ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos
.
Cuando transitaban por Paseo de la Reforma, un grupo se adelantó para colocar en una jardinera ubicada en la esquina de Avenida Juárez y la calle Humboldt un antimonumento
alusivo al halconazo. Este tipo de instalaciones han cobrado fuerza desde el primero que se instaló alusivo a la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, y ya hay varios en la ciudad: del 2 de octubre, la guardería ABC o los migrantes masacrados en San Fernando.
La pieza artística sobre el halconazo consiste en una V de la victoria pintada en color rojo, sobre una base en la cual se lee: Diez de junio. 1971-2021. Crimen de Estado ¡Ni perdón ni olvido!
Después de eso, al llegar la marcha al Zócalo capitalino, se realizó un mitin en el que Félix Hernández Gamundi, integrante del Comité 68, señaló que desde las masacres de 1968 y 1971 hemos sido testigos de un acto repetido de impunidad
, gracias al cual nunca ha sido juzgado Echeverría.
Recordó que en 2007 se interpuso una demanda contra el Estado mexicano ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la cual no ha avanzado, y reiteró que la exigencia de juicio contra Echeverría y sus cómplices
sigue firme, pues existen los elementos necesarios para juzgarlos por el delito de genocidio.