Con un historial musical iniciado en Reyno, agrupación de rock alternativo, Pablo Cantú funda Polaris, donde cataliza parte de sus inquietudes como multinstrumentalista y productor con el lanzamiento del álbum 1.5, grabación presentada apenas al inicio de esta semana en todas las plataformas digitales. 1.5 contiene ocho cortes y abre con Altar, pieza cercana a contemporánea cadencia electrónica; le siguen Elefante de papel, En el fin del mundo, Parte de mí, Delirio, Fuego y Voz de Marte canciones que sonun muestrario de sonoridades de diversos géneros musicales actuales.

Pablo Cantú da a conocer cómo nace Polaris: Es mi proyecto solista. Decidí ponerle un nombre de banda para tener flexibilidad, para no encasillarlo en un tipo de música y tener diferentes colaboraciones, como ahora la de Diego Rosas. Para mí, Polaris, es un espacio libre, donde puedo involucrar a quien desee. Un poco lo que hace Damon Albarn con Gorillaz. Me gusta mucho ese protagonismo que se decide no siempre tenerlo.

Polaris, la estrella del norte

Respecto a los nombres y títulos en su quehacer musical, Cantú explica: “Me gusta la simbología de Polaris –la estrella del norte– y es un proyecto donde no quiero olvidarme de lo lúdico y de la palabra experimentación. Al disco le pongo 1.5 porque para mí fue el experimento 1.5. Lo tuve que rehacer tantas veces, que la que quedó fue la versión 1.5”

Voz de Marte es el corte elegido como sencillo; al respecto, el joven compositor dice:“Es una de las canciones que mejor retratan la búsqueda y la época en que la hice y muestra un nivel de composición compartida con alguien más. Y me enorgullece no haber buscado un gran nombre, sino un gran talento que trabaja con tanta humildad bien entendida: Diego Rosas.

Por otro lado, Voz de Marte es de esas canciones, que siento, cubre todos los frentes que pretendía abarcar en este proceso: una lírica soñadora, abstracta, lúdica. Tiene frases como, mantricas –nunca es tarde– y en los coros, repite ‘despertar, despertar’. Pero disfruto mucho estas canciones que no tienen una narrativa tan precisa y van dando regalitos en diversos momentos de la vida. Siento que es una canción que va a pasar bien la prueba del tiempo. En el disco traté de no tener límites.